Aguascalientes, Ags.

El estudiante Luis Rodolfo Mariscal falleció ayer por una tromboembolia pulmonar, producto de los golpes que recibió el pasado 16 de agosto a manos de los jugadores del Necaxa, el uruguayo Luis Gorocito y Alejandro Molina, en una riña afuera de un bar en el centro comercial Plaza los Arcos.

Los futbolistas están presos en una cárcel de esta ciudad y con la muerte del joven de 22 años su condena aumentará.

Mariscal, quien estudiaba en el Instituto Tecnológico El Llano, ingresó la noche del lunes al hospital Hidalgo por una insuficiencia respiratoria. Se esperaba que cerca de las 13 horas de ayer fuera dado de alta. Sin embargo, su estado se complicó repentinamente y murió.

Así lo informó Hugo Guzmán, amigo de la familia, luego de que las autoridades del nosocomio se negaron a dar entrevistas a los representantes de los medios de comunicación.

Guzmán, quien fue maestro en la preparatoria y amigo de Mariscal y de sus familiares señaló: Es muy triste, lo único que buscamos es que se haga justicia.

El joven fue operado nueve veces desde agosto, luego de la primera vez que ingresó al nosocomio en la madrugada del 16 de agosto con fracturas de cráneo y rostro que lo dejaron en coma.

Por otra parte, en entrevista con La Jornada, Juan Manuel Ponce Sánchez, presidente del Supremo Tribunal de Justicia, informó que no cambia la situación de los jugadores que ingresaron al Cereso de esta capital el pasado 18 de agosto.

Están bajo proceso acusados de lesiones dolosas y hay un amparo interpuesto por la defensa que no se ha resuelto, dijo.

Sin embargo, añadió que con la muerte del joven y la acción penal de la Fiscalía General del Estado tendrá que iniciarse un nuevo proceso en el que la juez primero de lo penal analizará los elementos a favor y en contra y el delito podría clasificarse como homicidio en riña, con penas de cuatro a 10 años de cárcel, o delito doloso, con prisión de 15 hasta 40 años.