Morelia, Mich.

Integrantes de las ocho escuelas normales de Michoacán retuvieron ayer ocho autobuses en la carretera Morelia-Pátzcuaro, cerca de la normal rural de Tiripetío, para trasladarse a distintos puntos de la ciudad y protestar contra la reforma educativa.

También acusaron al gobernador Silvano Aureoles de apoyar la embestida contra la educación pública. El mandatario advirtió la semana pasada que agotará el diálogo con los estudiantes, pero usará la fuerza pública para evitar bloqueo de carreteras.

Las protestas se iniciaron alrededor de las 9 horas. Unos 500 estudiantes se dividieron en tres grupos. Uno fue a la Secretaría de Educación del estado, donde desalojó a los empleados y cerró oficinas; otro se plantó frente a la Secretaría de Finanzas para exigir el pago de becas y la asignación automática de plazas, y el último se plantó varias horas frente al palacio de gobierno, sobre avenida Madero.

Uno de los normalistas, con el rostro cubierto, dijo que la movilización fue en repudio al examen para asignación de plazas. La reforma educativa prevé la evaluación docente como requisito para el ingreso, ascenso y permanencia en el servicio público. El mandatario perredista está a favor de esta disposición.

Cerca de las 13 horas los normalistas levantaron bloqueos y plantones y anunciaron que ayer por la noche se reunirían con funcionarios de las secretarías de Gobierno y de Educación.