Estructuras sociales contrastantes en lo rural, lo urbano y lo metropolitano
Deben asignárseles recursos similares, pues así son sus masas carenciales
a categoría urbana definida como localidades de 2 mil 500 habitantes o más es demasiado amplia. Por ello al final de la entrega del 9/10/15, después de haber analizado los cálculos de pobreza del MMIP distinguiendo sólo dos tipos de localidades: rurales y urbanas, prometí desagregar las urbanas en dos subgrupos: urbano no metropolitano (localidades entre 2 mil 500 y 99 mil 999 habitantes) y metropolitano (localidades de 100 mil y más habitantes). Nuestros tres medios serán entonces: medio rural (MR), medio urbano a secas, o no metropolitano (MU), y medio metropolitano (MM). Analicemos sus estructuras sociales. Los resultados detallados se presentan en el cuadro 1. Al ver los renglones de total de pobreza y de total de no pobreza, apreciamos que mientras en el MR 96 por ciento de la población es pobre y sólo 4 por ciento son no pobres, en el MM estas proporciones son de 74 y 26 por ciento. Nótese que la proporción de población no pobre (es decir, que vive en condiciones de dignidad o aún mejores) en el MM es seis veces mayor que en el MR, y que en el MU se observa una situación intermedia (90–10 por ciento) más cercana a la del MR que a la del MM. Si dividimos la población total de cada medio en tres grupos solamente: indigencia, pobreza no indigente y no pobres, la pirámide social (sin decimales) del MR es 55-41-4, mientras la del MM es 16-57-26 y la del MU es 34-56-10. En la pirámide social del MR la indigencia es el estrato social mayoritario y los no pobres son el grupo más pequeño; en agudo contraste, en la pirámide del MM el estrato social más pequeño es la indigencia y el grupo más numeroso es la pobreza no indigente; el MU comparte con el MR el que la no pobreza sea el estrato más pequeño y con el MM el que el grupo más grande sea la pobreza no indigente. Al movernos del MR al MU baja la importancia de la indigencia en 21 puntos, que se reparten 15 a la pobreza no indigente y seis a la no pobreza. Al pasar del MU al MM, la indigencia vuelve a bajar, ahora 18 puntos, la pobreza no indigente queda casi igual (sube un punto) y aumenta 16 puntos la no pobreza.
También resulta interesante destacar las diferencias de la no pobreza entre los tres medios. En primer lugar, su peso en el total va de sólo 4.4 por ciento en el MR, sube a 10.1 por ciento en el MU, más que duplicándose, y luego multiplicándose por 2.6, pasa a 26.4 por ciento. Pero la estructura interna de los no pobres en los estratos de Sanbrit (con satisfacción de necesidades básicas y requerimientos de ingresos-tiempo), clase media y clase alta, pasa de 2.5-1.6-0.2 en el MR, a 5.3-3.9-0.8 en el MU; en este cambio, los dos primeros estratos más que se duplican y el tercero se multiplica por cuatro. Al pasar de MU a MM, cuya pirámide de no pobres es: 11.5-11.8- 3.1, el primer estrato más que se duplica, mientras la clase media y la alta se multiplican por tres. La clase alta del MM pesa 15 veces más en la población total que la del MR. Tres Méxicos distintos.
En la gráfica se presenta la distribución de cada uno de los seis estratos simples (u originales, numerados 1, 2, 4, 7, 8 y 9) y de varias sumas de ellos, entre los tres medios. La primera parte (de abajo arriba) de las barras es el MR, la intermedia el MU, y la de arriba el MM. Conviene ver primero la distribución de la población total en los tres medios: 23 por ciento en el MR, 29.1 por ciento en el MU y 47.7 por ciento en el MM. Ahí se aprecia que en el MM viven más de las 3/4 partes de los no pobres (76.2 por ciento), alrededor de las 4/5 partes de las clases altas (83.5 por ciento) y medias (78.8 por ciento), sólo la cuarta parte (25.4 por ciento) de la indigencia, el 43 por ciento de la pobreza intensa y, el 58.7 por ciento de la pobreza moderada. Este último estrato y los tres estratos de no pobres están sobrerepresentados (en comparación con su participación en población) en el MM. En contraste, el único estrato original sobrerepresentado en el MR es la indigencia, mientras en el MU están sobrerepresentados la indigencia y la pobreza intensa.
El cuadro 2 presenta los cuatro indicadores clave de la pobreza para los tres medios (MR, MU y MM) en 2014. El número de personas pobres (q) es más alto en el MM (42.1 millones), seguido del MU (31.4 millones) y el más reducido es el MR (26.6 millones). En contraste, la incidencia (o proporción) de la pobreza en la población total (H= q/n), se mueve exactamente al revés, siendo más alta en el MR y más baja en el MU. Lo mismo ocurre con la intensidad de la pobreza (que expresa qué tan pobre es el pobre medio). En consecuencia HI, que combina los dos indicadores anteriores, y que es el indicador adecuado para ordenar conjuntos humanos por niveles de pobreza, al cual he denominado masa carencial per cápita, es el doble en el MR (0.4877) que en el MM (0.2464), mientras el MU se encuentra en una posición intermedia con 0.3815. Si queremos ordenar grupos humanos en términos de la masa carencial total, multiplicamos el número de personas pobres por la intensidad media (I) de su pobreza, para obtener qI o masa carencial total. Sorprendentemente, las masas carenciales totales de los tres medios son muy similares (entre 13.3 millones en el MU y 14.1 millones en el MM, con el valor del MR en posición intermedia (13.6 millones), por lo cual el conjunto de programas de lucha contra la pobreza deberían asignar montos de recursos similares a los tres medios.