La recompensa hasta de 1.5 millones de pesos que ofrece la Procuraduría General de la República (PGR) a quien o quienes proporcionen datos para la localización de Rosendo Radilla, víctima de desaparición forzada en 1974, fue a raíz de la petición que desde hace más de un año hizo la familia, reveló Tita Radilla, hija del líder social guerrerense.

Y aunque dijo que esta acción ‘‘pareciera absurda’’ después de tanto tiempo, ‘‘creemos que hay personas que deben saber dónde está Rosendo y quiénes son los responsables’’. Por ello, pidió que quien sepa algo hable y que se diga la verdad, no sólo en el tema de Rosendo Radilla, sino de todos los casos de campesinos, maestros y estudiantes que han desaparecido; ‘‘estamos buscando también a todos los demás’’.

Entrevistada en la ciudad de México, adonde llegó ayer como una más de las 140 mujeres que integran la caravana El Rocío de la Esperanza, Tita Radilla señaló que sin duda hay perpetradores que aún están vivos después de todo este tiempo, así como testigos de esos hechos, quienes podrían hablar para que se sepa la verdad sobre esas desapariciones.

‘‘Demandamos justicia por los hechos que han ocurrido, por los desaparecidos, por los masacrados; esos hechos permanecen en total impunidad’’, dijo la también vicepresidenta de la Asociación de Familiares de Detenidos-Desaparecidos y Víctimas de Violaciones a Derechos Humanos.

Consideró que éstas y muchas otras acciones debieron realizarse desde hace tiempo por las autoridades para dar con el paradero de los desaparecidos, pero siempre han asumido una ‘‘actitud de simulación’’, en la que aparentan, principalmente ante instancias gubernamentales, que cumplen y resguardan el respeto a los derechos humanos.

Recordó que el próximo noviembre se cumplen seis años de la sentencia del caso Rosendo Radilla, emitida por la Corte Interamericana de Derechos Humanos en contra del Estado mexicano por desaparición forzada, sin que hasta el momento se haya dado total cumplimiento a dicha decisión.

Por ejemplo, citó que el acto de reconocimiento del agravio a la familia lo hizo el gobierno ‘‘sin notificarnos nada. La familia no ha sido desagraviada, porque son hechos que hicieron ellos solos (las autoridades). Todo lo hacen simulando ante instancias internacionales, pero sólo es un aparente cumplimiento de la sentencia’’.