Con el fin de contrarrestar la intensa campaña de grupos antagónicos al cultivo de transgénicos, en particular del maíz, la asociación AgroBio –que agrupa a las cinco grandes empresas que producen estas semillas en el mundo– promovió la Alianza Pro Transgénicos, apoyada por apenas 19 investigadores y agricultores industriales.

Esos grupos antagónicos mantienen un estatus absurdo y amenazante, con respecto a riesgo o daños inexistentes y prejuicios por aplicaciones de la biotecnología, señaló Jaime Padilla, director científico de esa asociación, en un documento en que convocó a organizaciones y expertos a participar en esa alianza.

El texto señala que este momento es importante para la integración de la alianza porque se dieron cambios en áreas claves, con la designación de titulares en las secretarías de Agricultura y de Medio Ambiente (dependencias responsables de autorizar el cultivo de transgénicos), así como la integración de la nueva Cámara de Diputados y la próxima resolución del Poder Judicial sobre la suspensión de permisos para maíz genéticamente modificado.

Agrega que la alianza busca lograr mayor presencia mediática, anímica y didáctica de un grupo diverso que debe manifestar su trabajo y su opinión, luego de admitir que ha habido efectividad relativa en las intervenciones en apoyo del cultivo de transgénicos, ya que no ha sido suficiente para avanzar a la velocidad o solidez con que se debería haber dado.

La alianza expresó públicamente el pasado 29 de septiembre que es urgente la expedición de permisos para la siembra experimental, piloto y comercial de maíz transgénico, así como continuar con las siembras comerciales de soya y algodón transgénicos y de los cultivos que están en desarrollo en los diferentes centros de investigación en el país.

La entrega de permisos para la siembra experimental, piloto y comercial de maíz transgénico está detenida, porque los científicos y ciudadanos que presentaron una acción colectiva en contra apelaron de la resolución judicial que permitía al gobierno volver a dar las autorizaciones.

Esta última resolución judicial se dio luego de dos años de que un juez, al aceptar la acción colectiva, estableció como medida precautoria la prohibición al gobierno de dar los permisos de siembra. El juzgado revocó esta determinación judicial, pero la Colectividad del Maíz presentó una apelación que está por resolverse. En tanto, continúa la prohibición al gobierno para entregar permisos de cultivo.

En la Alianza Pro Transgénicos participan AgroBio con las transnacionales Monsanto, Syngenta, Pionner, Dow AgroSciences y Bayer. También el Consejo Nacional Agropecuario, la Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio y Departamentales, agrupaciones de productores de estados del norte, e investigadores como Luis Herrera y David Mota, entre otros.