Avances democráticos hasta que sean derrotados los terroristas, advierte Damasco
La operación militar durará todo lo que sea necesario, aclara integrante de la Duma
Sábado 3 de octubre de 2015, p. 19
Washington.
La estrategia de Rusia en Siria, en apoyo al presidente sirio Bashar al Assad, es una receta para el desastre
, afirmó este viernes el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, y estimó que aún es posible trabajar con Moscú para reducir tensiones, durante el tercer día de bombardeos rusos en territorio sirio.
De acuerdo con Obama, el presidente ruso, Vladimir Putin, no hace diferencias entre la organización yihadista Estado Islámico (EI) y la oposición sunita moderada que quiere la salida de Al Assad. Desde su perspectiva, todos son terroristas, y eso es una receta para el desastre
.
Los ataques aéreos de Rusia contra la oposición moderada van a ser contraproducentes
, dijo, si bien consideró que es posible
trabajar con Rusia e Irán, aliados de Al Assad, para encontrar una solución política si Moscú reconoce que el presidente sirio debe dejar el poder.
La coalición liderada por Estados Unidos, que lleva su propia guerra contra el EI desde agosto de 2014, también pidió a la Federación Rusa que ponga fin a los ataques contra objetivos que no sean los islamitas, al asegurar que sólo alimentan más extremismo y radicalización
.
Putin mantuvo una reunión en París con su par francés, François Hollande, e insistió en que Al Assad debe permanecer en el poder como parte de su propuesta de gran coalición
ruso-sirio-occidental para derrotar al EI.
De su lado, el canciller sirio Walid Muallem afirmó en la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas que su país está dispuesto a participar en conversaciones de paz lideradas por el organismo mundial para acabar con el conflicto armado, iniciado hace cuatro años, pero apuntó que no podemos pasar a procedimientos democráticos mientras no sean derrotados los terroristas
.
Rusia informó que sus cazas realizaron este viernes 18 incursiones que alcanzaron 12 objetivos como un puesto de mando y un centro de comunicaciones en la provincia de Alepo, un campamento de milicianos en Idlib y un puesto de mando en Hama.
Los ataques se centraron en Raqqa –la capital del califato
proclamado por el EI en una amplias zona de Siria e Irak–, donde 12 combatientes fallecieron, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, con sede en Londres y que cuenta con datos recopilados por activistas opositores en Siria, que también mencionó la muerte de siete civiles en Idlib, de ellos un niño y dos mujeres.
El presidente del comité de asuntos exteriores de la Duma, Alexei Puschkov, indicó en Moscú que la operación militar de Rusia en Siria durará todo lo que sea necesario, al desmentir informaciones francesas que le atribuyeron haber hablado de una duración de entre tres y cuatro meses.