Cancún, QR.

México es uno de los países que más se beneficiarán de un comercio responsable de armas convencionales, afirmó el titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), José Antonio Meade, tras enfatizar que se trata de evitar que el armamento caiga en manos de criminales.

En entrevista, tras inaugurar la primera Conferencia de Estados parte del Tratado sobre Comercio de Armas, el canciller expresó que ese convenio es prueba de que la diplomacia salva vidas, al reducir conflictos y violencia que traen tanto sufrimiento a hombres y mujeres en todo el mundo. Ello, sin aludir directamente al creciente tráfico de armas desde Estados Unidos que han llegado a manos de organizaciones criminales en México o el episodio de la operación Rápido y Furioso.

–Este tratado incide directamente en una industria que genera millones de dólares.

–Complementa esfuerzos bilaterales, que cada país hace como responsable de su seguridad interna, pero impone a los diferentes estados parte de ese acuerdo que las empresas que producen armas hagan análisis de riesgo, que levanten registros, que intercambien información. Todo ello permitirá regular el mercado de armas convencionales, bajar los riesgos de que el armamento llegue a manos de quienes van a hacer mal uso de éste.

–¿Qué representa que esta conferencia se lleve a cabo aquí?

–México sería uno de los países que más se beneficiaría de un comercio responsable de armas convencionales, que se dé bajo una mejor arquitectura y busque evitar que el armamento llegue a manos que harán mal uso de éste. Para nosotros, es un reto importante. Se reconoce que el espacio del despliegue internacional es parte de la solución de los problemas. Por eso México ha sido escogido como el lugar donde sesionan por vez primera los países que forman parte del tratado.

Meade Kuribreña destacó que la presencia en Cancún, Quintana Roo, de la tercera parte de los países que integran Naciones Unidas es muestra de que hay poquitos temas que son fundamentalmente de naturaleza interior y que la frontera entre esos problemas y el espacio internacional es que éstos se discuten cada vez de manera más tenue.

Subrayó: “Ejemplo de ello es el deseo de inclusión de que México aportará en Naciones Unidas, adonde iremos para definir las metas posteriores a 2015. Esto en respuesta al llamado que hace el presidente Enrique Peña Nieto a que la política social sea incluyente.

Eso quiere decir que estamos logrando que el mundo comparta elementos que México se planteó como prioritarios. Al mismo tiempo, que la política interior de del país encuentra un espacio en la definición de las metas posteriores a 2015. Un tema como el de las armas o un debate como el de drogas pone de relieve que hay muchos retos que tienen naturaleza global y México debe ser parte de las voces que participan en la construcción de propuestas concretas.

–¿Este acuerdo obliga a los países a ajustar su participación en el mercado de armas?

–La idea de que busquemos universalizar el tratado es que lo que se desprenda sea un estándar que norme el mercado.