El presidente nacional del PRD, Carlos Navarrete, rechazó ayer considerar los incidentes diplomáticos con cuatro representantes de fuerzas progresistas –dos vascos, una diputada boliviana y una colombiana– como una persecución para el Foro de Sao Paulo.

No quiero adelantarme, sostuvo. Aseguró que esperan que la cancillería responda el lunes a una solicitud que le presentaron para tener un conducto directo con la dependencia y abordar lo ocurrido.

Sostuvo que esos hechos pudieron ser incidentes diplomáticos y consideró el caso de los integrantes de la agrupación política vasca independentista Sortu, Asier Altuna y Floren Aoiz, como el tema más delicado.

Aseguró: No teníamos conocimiento de que iban a llegar y no se tomaron medidas preventivas. El gobierno mexicano tomó medidas y los deportaron. En realidad no, porque nunca entraron a territorio mexicano. En la aduana del aeropuerto ni siquiera los dejaron entrar. Pero también vamos a pedir información al gobierno mexicano de cuáles fueron las razones.

En cuanto a la parlamentaria boliviana, Leonilda Zurita, resaltó que no había razón para que se le negara la visa.

Sobre Gloria Flórez, secretaria de Gobierno de la alcaldía de Bogotá, retenida tres horas en el aeropuerto capitalino, y quien fue objeto de una revisión exhaustiva de sus cosas y documentos, a su llegada, dijo: en realidad fue un incidente menor, no pasó a mayores. Ella misma nos ha dicho ya no necesita una intervención extra.