Los precios de las materias primas, principalmente metales y petróleo, registraron en julio sus mayores caídas en más de siete años, en el caso del crudo, y de cinco años en el oro, en un contexto de la desaceleración en la economía de China –el mayor importador– y ante la expectativa en los mercados de que la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) suba las tasas de interés en septiembre. Ante esto, el Banco Mundial anticipa que el valor de las materias básicas, incluidos alimentos, será inferior en este año.