Naucalpan, Méx. Tiene usted 10 minutos para sacar sus cosas madre, me dijo uno de los granaderos pasadas las ocho de la mañana del viernes, cuando entraron y comenzaron a romper lo que había a su paso, denunció Ivón Claudia Deciga, de 43 años, una de las 200 familias desalojadas el viernes del Parque de los Remedios. Ella y otros vecinos coincidieron en que la alcaldía no les notificó que debían abandonar sus casas. Ayer continuó la demolición de las 150 que había dentro de la reserva ecológica. La mujer exigió la presencia de la alcaldesa Claudia Oyoque.