Diversas protestas se realizaron ayer en las ciudades de Chilpancingo, Tixtla y Tlapa, al cumplirse nueve meses de la desaparición de 43 normalistas de Ayotzinapa. Además, durante las manifestaciones se hizo patente el rechazo a la reforma educativa.

En Chilpancingo, unos 500 integrantes de la Coordinadora Estatal de los Trabajadores de la Educación de Guerrero (Ceteg) marcharon por la mañana en la Autopista del Sol México-Acapulco, y luego bloquearon por espacio de una hora dicha vía.

Cerca de las 14 horas arribaron al lugar contingentes de la Policía Federal, que replegaron a los manifestantes, quienes optaron por regresar al plantón que mantienen afuera de las instalaciones de la Secretaría de Educación de Guerrero (SEG).

El dirigente de la Ceteg, Ramos Reyes Guerrero, manifestó: pedimos al gobierno federal respeto al magisterio; nosotros realizaremos marchas y plantones contra la imposición de una evaluación punitiva, y lo haremos junto con la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE).

En Tixtla, integrantes de la Ceteg y del Movimiento Popular de Guerrero (MPG) tomaron la sede alterna del palacio municipal, en apoyo a la lucha de los padres de los normalistas desaparecidos.

En Tlapa, contingentes del MPG exigieron la presentación con vida de los 43 estudiantes, así como castigo a los responsables del asesinato de su dirigente, Antonio Vivar Díaz, ocurrido el pasado 7 de junio.

En ese contexto, unas 60 estudiantes del octavo semestre de la Escuela de Enfermería de la Universidad Autónoma de Guerrero bloquearon la avenida Juárez, porque la dirección del plantel pretende cobrarles 600 pesos para el pago de su servicio social.

Pasando las 16 horas llegaron 120 policías estatales en tres camiones y patrullas, varios de ellos con armas largas, quienes empujaron a las estudiantes hasta replegarlas en la banqueta.

En Morelos, unos 2 mil integrantes del Movimiento de Bases Magisteriales marcharon en repudio a la reforma educativa. Anunciaron que suspenderán labores a partir del próximo miércoles, en rechazo a la evaluación punitiva, que sólo busca reprobarlos para conseguir el cambio del sistema educativo a través del remplazo de los trabajadores.

Los maestros también se pronunciaron por que los gobiernos federal y el de Guerrero presenten con vida a los normalistas de Ayotzinapa desaparecidos.

En Aguascalientes, unos 500 maestros en activo y jubilados marcharon desde la avenida López Mateos hasta la sede de la sección uno del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, ubicada en el oriente de esta capital.

Entre otras cosas se manifestaron para exigir el pago total a los maestros jubilados, dispensar los descuentos que les hacen diversas instituciones, como el Fovissste, y que bonos que reciben no sean gravados. Además mostraron su rechazo a la evaluación punitiva de los docentes.