Nuevo escándalo de corrupción afecta a diplomático español
Jueves 23 de abril de 2015, p. 23
Madrid.
El presidente del gobierno español, Mariano Rajoy, defendió este jueves la amnistía fiscal dispuesta por su gobierno que favoreció al ex director del Fondo Monetario Internacional (FMI), Rodrigo Rato, acusado de cinco delitos fiscales, blanqueo de capitales y alzamiento de bienes. Más aún, el gobernante dijo que se enteró por la prensa
de la investigación abierta contra el ex vicepresidente español.
Ante el Congreso de los Diputados, Rajoy rechazó que se revelen los nombres de los 715 beneficiados con la amnistía fiscal decretada en 2012, y que son investigados por la justicia, como lo exigieron los grupos de oposición. Se estima que unos 30 mil ciudadanos fueron favorecidos por la amnistía.
Al dirigirse a los diputados del Partido Socialista Obrero Español, Rajoy aseveró: ustedes estuvieron en el gobierno 22 años y nunca dieron un nombre, ni regularizado ni sin regularizar. Yo voy a hacer lo mismo. Lo que no me parece bien es que ustedes hagan una cosa cuando están en el gobierno y hagan otra cuando están en la oposición
.
En este contexto, surgió un nuevo escándalo de corrupción, que afecta a Federico Trillo, embajador de España en Reino Unido y ex ministro de Defensa durante el gobierno de José María Aznar (1996-2004). Trillo, según el diario El País, habría cobrado a una constructora 354 mil euros (seis millones de pesos mexicanos) por trabajos de asesoría
que no constan en ningún lugar.
En la misma trama estaría implicado Vicente Martínez-Pujalte, veterano diputado del gobernante Partido Popular que fungió durante dos legislaturas como el vocero de la Comisión de Economía y Hacienda, y habría recibido unos 75 mil euros (un millón 250 mil pesos).
Las supuestas irregularidades fueron identificadas por peritos de la Agencia Tributaria, que sospechan que en la contabilidad de la firma Sirga XXI Consultores y Estudio Jurídico Labor, las firmas de Trillo y Pujalte, no se encontró ningún documento ni proyecto por el supuesto trabajo de consultoría que realizaban y que afecta al plan de implementación de la energía eólica en Castilla y León.
El paso de Trillo por el gobierno de Aznar estuvo plagado de polémicas e irregularidades, sobre todo a raíz del trágico accidente del avión militar Yak-42, en el que murieron 75 militares españoles cuando él era ministro y hasta la fecha las familias de las víctimas mantienen un enfrentamiento con los dirigentes del PP por su gestión de la crisis y por haber repatriado los cadáveres sin su identificación.