La circunstancia actual de México se debe a un problema más antiguo y agudo que la narcoviolencia, considera el artista belga Francis Alÿs (Amberes, 1959), de quien hoy se inauguran, de forma simultánea, dos exposiciones en la ciudad de México.

“Es un fenómeno más generalizado, de corrupción, que comenzó mucho antes de la narcoviolencia. El problema de la frontera, para enfocarlo en la zona, empezó desde Vicente Fox. O sea, vemos los efectos de una acumulación de descuido y de corrupción regional y nacional”, explica.

Siento que las personas están muy frustradas y más que desesperadas; se nos fue la esperanza. Y eso es muy crítico, es un punto crítico.

Radicado desde 1986 en México –adonde llegó como arquitecto para participar en la reconstrucción del DF, tras el terremoto de 1985– Alÿs hizo tales observaciones a propósito de la muestra Hotel Juárez, que se presenta en la Sala de Arte Público Siqueiros (Tres Picos 29, Polanco).

La exhibición reúne algunas de las obras más recientes de este creador, uno de los más reconocidos en el panorama mundial del arte contemporáneo. Entre ellas, un par de documentales realizados entre 2013 y 2015 en Ciudad Juárez, Chihuahua, lugar que seleccionó como ejemplo de lo que ocurre en gran parte de la República.

El país se está deshaciendo

Estas obras, precisa Alÿs, son un intento de reacción a la situación de violencia y de falta total de crédito de las autoridades y los políticos. Más que nada son preguntas, un primer contacto con la actual situación del país.

En esos videos el artista muestra, por una parte, un recorrido nocturno por la zona centro de esa ciudad fronteriza pateando una bola de fuego y dando cuenta de la dinámica de ese punto de la urbe; por otra, documenta cómo un grupo de niños toma como lugar de juegos una unidad habitacional del Infonavit abandonada desde 2009.

En lo anterior embona bien la descripción hecha por el crítico de arte Cuauhtémoc Medina sobre las propuestas de Francis Alÿs que forman la muestra Relato de una negociación, que se exhibe en el Museo Tamayo de Arte Contemporáneo, en la cual se consigna su producción de los recientes 15 años.

Instalación de Francis Alÿs incluida en la exposición Relato de una negociación, que hoy se abre al público en el museo Tamayo (Reforma, esquina Gandhi, Bosque de Chapultepec)Foto Jesús Villaseca

Son acciones que tratan de medir cuáles son las posibilidades artísticas en lugares de gran tensión social, geográfica y política, dijo Medina, quien es curador de esa exposición, en la cual se presentan proyectos realizados en Afganistán, entre Cuba y Estados Unidos, y entre Marruecos y España.

Hotel Juárez y Relato de una negociación están interconectadas por una pieza creada ex profeso por Alÿs. Es un vínculo físico entre los dos recintos ubicados en Polanco, erigido por un sendero de casi un kilómetro trazado con dos hilos de tinta, uno rosa y otro azul, que comienza y termina en botes de pintura en los edificios

Estas muestras en torno del artista marcan el comienzo de una serie de colaboraciones entre la sala Siqueiros y el museo Tamayo, a decir de la titular del primer recinto, Taiyana Pimentel.

Según Francis Alÿs ha sido muy aleccionador y estimulante hacer obra en Afganistán, Marruecos, Cuba y Estados Unidos en años recientes, pero tuvo que regresar a la fuente, a lo que ahora se exhibe en la sala Siqueiros, porque el país se está deshaciendo.

Aclara que como artista su interés no es dar respuestas, sino hacer evidentes situaciones y entornos, así como cuestionar cuál es el papel de los creadores dentro de lo que él llama este marasmo nacional.

¿De quién es la culpa de que el país esté en esta situación? La culpa es de los políticos, pero también de los intelectuales y los artistas. La culpa es mucho más... Es muy fácil poner el dedo sobre (los ex presidentes) (Carlos) Salinas, (Vicente) Fox o sobre quien sea, pero creo que va mucho más atrás el problema, y es generalizado, considera.