Ciudad del Vaticano.

Óscar Arnulfo Romero, conocido mundialmente como el obispo de los pobres, será elevado a beato de la Iglesia católica en la capital de El Salvador el próximo 23 de mayo.

Vincenzo Paglia, postulador (abogado defensor) de la causa de beatificación de Romero, confirmó la fecha de la ceremonia, en la cual se espera la participación de aproximadamente un millón de personas.

Nacido el 15 de agosto de 1917 en Ciudad Barrios, el arzobispo de San Salvador fue asesinado en odio a la fe el 24 de marzo de 1980 en la capital salvadoreña. El obispo fue ejecutado por un sicario mientras celebraba misa en la capilla del Hospital de la Divina Providencia. El autor intelectual reconocido del crimen fue Roberto D’Aubuisson, líder del partido conservador Alianza Republicana Nacionalista (Arena).

Con la decisión del papa Francisco de reconocer su martirio, se puso punto final a casi 35 años de polémicas políticas. En su tiempo Romero fue acusado de ser un obispo rojo y filocomunista, por sus duros sermones contra el avance violento del ejército en medio de un sangriento conflicto interno.

Esa predicación le hizo también ganar el título de obispo de los pobres y en El Salvador desde hace años se le venera espontáneamente como santo.

Su causa de beatificación, iniciada oficialmente en 1997, permaneció detenida durante años en el Vaticano y su desbloqueo se dio después de una personal atención del Papa.