Nueve personas mueren cada día a causa del cáncer colorrectal y al año se registran más de 5 mil nuevos casos, por lo que es urgente ampliar la cobertura de atención médica, en particular del Seguro Popular, afirmó la Asociación Mexicana de Lucha Contra el Cáncer (AMLCC).

La organización recordó que desde 2012 ese esquema de atención cubre los costos del tratamiento integral de ese tipo de tumor maligno; pero a la fecha sólo siete hospitales están acreditados para atender a los enfermos. Ha sido un proceso largo para llegar a este número porque los requisitos para que un nosocomio sea incluido entre los proveedores de servicios para los afiliados del Seguro Popular son en extremo rigurosos.

Mayra Galindo, directora de la AMLCC, señaló que algunos de las condiciones que deben cumplir las unidades médicas podrían suplirse, por ejemplo, mediante convenios con laboratorios clínicos, donde los pacientes pudieran someterse a alguno de los estudios de imagen que requieren los médicos para el diagnóstico y tratamiento de la enfermedad.

De acuerdo con información de la Comisión Nacional de Protección Social en Salud, el objetivo de los requisitos que deben cumplir las unidades médicas tienen como única finalidad garantizar una atención médica de calidad para sus afiliados.

De ahí que únicamente hayan aprobado los requisitos por ahora los Centros Estatales de Oncología de Campeche, Chihuahua y Durango; los hospitales regionales de Alta Especialidad Ciudad Salud, de Tapachula, Chiapas; el Bajío, Guanajuato; Ciudad Victoria, Tamaulipas, y el de Yucatán.

Están en el proceso de evaluación hospitales de Guanajuato, Jalisco, Nayarit, Puebla, Querétaro, San Luis Potosí, Sinaloa, Veracruz y Yucatán.

Galindo comentó que para la atención de personas con cáncer colorrectal debería existir, al menos un hospital acreditado en cada estado de la República o uno regional, que atienda la demanda de cinco entidades.

La AMLCC organizó ayer una conferencia con este tema, con motivo del Mes mundial del cáncer colorrectal, que se celebra en marzo. Ahí la agrupación destacó que 60 por ciento de los casos de esta neoplasia se diagnostica en etapas avanzadas.

Resaltó que al igual que el resto de los tumores malignos, las medidas básicas de prevención consisten en llevar un estilo de vida saludable, es decir, una alimentación con bajo contenido de sal, grasa y azúcar, y la realización de ejercicio físico. También dejar de fumar o tener un consumo nocivo de alcohol contribuyen a disminuir el riesgo de desarrollar cáncer.

La AMLCC indicó que en ocasiones el diagnóstico tardío se debe a que las personas no hacen caso de los síntomas, como alteraciones en el tránsito intestinal (estreñimiento o diarrea), cambios en el aspecto (grosor) y consistencia de las heces, dolor abdominal, pérdida de peso, desechos oscuros o con sangre y aumento del abdomen.