Miércoles 11 de marzo de 2015, p. 5
Una vez conjurada la amenaza de vender valiosa colección pública de arte, en custodia del Instituto de Artes de Detroit (DIA, por sus siglas en inglés), para saldar deuda de esa ciudad estadunidense y superar la bancarrota, como se informó en estas páginas (La Jornada, 18/12/14), la institución, faro de la cultura en esa metrópoli, se apresta para inaugurar, el domingo 15, una exposición alrededor de la estancia de Diego Rivera y Frida Kahlo en Detroit.
El DIA invita a descubrir cómo los pintores mexicanos dejaron huella en Detroit y cómo esta urbe marcó su arte.
Con esa finalidad, la muestra Diego Rivera y Frida Kahlo en Detroit reúne unas 70 obras de arte que representan la evolución de las carreras de ambos artistas.
La exhibición, con la curaduría de Marcos Rosenthal, incluye ocho dibujos preparatorios de Rivera (1886-1957) para crear los murales Industria de Detroit, integrado por 27 paneles realizados entre 1932 y 1933, considerado el mejor ejemplo del muralismo mexicano en Estados Unidos, y 23 trabajos de Kahlo (1907-1954), cuya obra se muestra por primera vez en el DIA.
Fundado en 1885, la colección del instituto figura entre las primeras seis de Estados Unidos, que agrupa desde la prehistoria hasta el siglo XXI. Su museo tiene cien galerías, una biblioteca especializada en arte y un laboratorio dedicado a la conservación de las obras.
Por fortuna Diego Rivera, dibujante de utopías socialistas y defensor de la clase obrera, no terminó pagando la debacle financiera de Detroit.
Así, la voracidad debió renunciar a la barata de arte público propuesta para solventar deuda pública, pues rematar las obras maestras del DIA se consideró entre las acciones sugeridas para apaciguar a los acreedores.