El grupo Ska-P celebró en México 20 años de trayectoria con una fiesta de casi dos horas en el Palacio de los Deportes, donde sus miles de fans se rindieron ante el sonido de los españoles y bailaron tanto en las gradas como en los palcos y la pista.

Los 16 mil fanáticos que se dieron cita, incluso desde horas antes del inicio del concierto, disfrutaron de rolas como Full ga y Estampida, con las que arrancó la velada en la que nadie se resistió a cantar o saltar desde su lugar con los puños en alto.

¡México!, ¿cómo están?, ¿listos?, expresó Roberto Gañán, vocalista de la banda antes del tema Crimen sollicitationis, que se desprende de su séptimo álbum de estudio, Lágrimas y gozos, con el que apareció en el escenario un diablo.

La euforia de los miles de jóvenes, quienes no pararon de crear varios slams continuó con Abolición y Vergüenza, con la que se hizo presente un torero en el escenario para amenizar más el ambiente y continuar con Cannabis y ETTS.

Algunas imágenes de movimientos sociales en el extranjero se asomaron en la pantalla central del entarimado con la pieza Se acabó, que incluyó, como en los demás cortes, trompeta, batería y guitarras eléctricas.

El concierto transcurría y el baile en la pista aumentó de intensidad, al grado que algunos decidieron desprenderse de sus playeras, en tanto que otros optaron por lanzar cerveza por los aires.

El toque escocés llegó cuando uno de los integrantes apareció ataviado con una falda de Escocia y sonaron algunas gaitas durante la rola Derecho de admisión. Después, con Ska-pa, los anfitriones invitaron a algunos niños a subir a bailar con ellos.

La banda española, que actualmente promociona su material discográfico más reciente 99%, incluyó en la producción de este concierto, además de imágenes, diversos juegos de luces que aumentaron el fervor de los presentes con temas como Mis colegas, Romero el madero e Intifada.