Lerma, Mex.

Ocho comuneros de San Francisco Xochicuautla, en este municipio, opositores a la construcción de la autopista Toluca-Naucalpan, fueron detenidos el mediodía de ayer por policías estatales cuando exigían a trabajadores de la empresa Autovan que salieran de sus predios, pues violan una suspensión definitiva concedida por un juez de distrito.

Muy temprano, habitantes de Xochicuautla vieron subir al monte varios autobuses repletos de policías antimotines, y supusieron que Autovan –dependiente de constructora Teya– reanudaría la tala de árboles para construir la autopista.

Los comuneros subieron al paraje Buenavista, donde hallaron trascabos de Teya. Exigieron al personal de la compañía que mostrara documentos que justificaran su presencia en tierras comunales de Xochicuautla, pero se negaron.

Minutos después unos 300 granaderos ordenaron a los campesinos marcharse, pero éstos se opusieron. Algunos se sentaron frente al trascabo y los antimotines detuvieron a ocho personas.

En mayo pasado habitantes de San Francisco Xochicuautla obtuvieron una sentencia favorable de un juez de distrito, quien ordenó suspender la construcción de la carretera en esta comunidad, pues las asambleas comunales que avalaron la obra fueron irregulares y debían reponerse. En tanto, la constructora no podía realizar obras.

Al cierre de esta edición, Armando García, delegado de Xochicuautla; Venancio y Domingo Hernández, Rosa Saavedra, Felipa Gutiérrez, Mauricio y Francisca Reyes y Jerónimo Martínez seguían declarando en las instalaciones de la procuraduría mexiquense y en espera de ser presentados ante el Ministerio Público.