Kansas City, 29 de octubre.

Madison Bumgarner estaba calentando esta semana en el estadio Kauffman, relajándose con sus compañeros de equipo de San Francisco, cuando Tim Hudson y Michael Morse se acercaron por detrás y despeinaron el largo y desaliñado cabello del lanzador.

Bumgarner giró rápidamente y luchó en broma con sus amigos. Ellos fueron los únicos que pudieron hacer contacto con el lanzador en esta Serie Mundial.

El zurdo de 25 años coronó una histórica actuación al ser elegido el jugador más valioso de la Serie, luego de lanzar cinco entradas en blanco como relevista del séptimo partido y dominar a los Reales de Kansas City con pizarra de 3-2.

En este momento no me siento nada cansado. Acabamos de ganar la Serie Mundial. Es difícil sentirse cansado en este instante. Probablemente mañana lo estaré, dijo Bumgarner.

El pítcher ganó por tercera vez la Serie Mundial, luego de que Randy Johnson lo logró en 2001.

“No pensaba en entradas ni en conteo de lanzamientos. Sólo pensaba en sacar outs, y seguir sacándolos hasta que ya no pudiera hacerlo y necesitáramos a alguien más. Afortunadamente logramos sacar algunas entradas rápido y pude mantenerme en el juego”, dijo Bumgarner.

No puedo mentirles más. Estoy fundido, concluyó.

Por su parte, Gregor Blanco, el jardinero central que cometió un error en la última entrada que le pudo costar el título a los Gigantes, describió el momento difícil que vivió cuando no pudo levantar la bola.

El mánager de San Francisco, Bruce Bochy, festeja la conquista de la Serie Mundial en el séptimo juego, para llevarse su octavo título de Grandes LigasFoto Ap

El lanzador Madison Bumgarner sostiene su trofeo como jugador más valioso. En la mesa, la presea para el equipo campeónFoto Ap

“Yo buscaba agarrarla, me dije: ‘tranquilo’, pero en ese momento ya era demasiado tarde. Pasó lo que pasó. Confié en mi compañero Madison Bumgarner y ahora estamos viviendo esta sensación tan bonita”, dijo apenado al terminar el partido.

Blanco recordó que a pesar de que el equipo no está completo y de que llegaron como comodines a esta serie, ahora pueden sentirse orgullosos de ser campeones del mundo.

Por su parte, el venezolano Pablo Sandoval, el anotador de dos de las tres carreras con las que obtuvo el título San Francisco, hizo un breve pero emotivo recuento de lo que significó la campaña y del trabajo del lanzador Bumgarner:

Fue una temporada que disfruté mucho, no fue fácil, dijo emocionado el llamado Kung Fu Panda, quien bromeó al decir que el lanzador Bumgarner no es de este planeta.

El trabajo que él hace, todo lo que hizo en esta serie y el día de hoy, creo que no es de este planeta, abundó.

Para los Reales fue el final de una mágica temporada, en la que se clasificaron a los playoffs luego de que en 1985 obtuvieron su primer campeonato.

Duele quedar tan cerca como lo hemos estado, en un juego definido por una carrera, señaló el mánager de los Reales, Ned Yost.