Jueves 2 de octubre de 2014, p. 32
Washington, 1º de octubre.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) advirtió sobre el crecimiento excesivo
del sistema bancario paralelo, también llamado shadow banking (bancos en la sombra), por los que transitan miles de millones de dólares y que podrían amenazar la estabilidad financiera, sobre todo en Estados Unidos.
Los actores de este mercado en plena expansión (fondos de inversiones, fondos monetarios, sociedades financieras, aseguradoras...) actúan como bancos
, prestando dinero procedente de inversionistas pero sin someterse a regulación, indicó en un reporte el FMI. Las sumas manejadas por este sistema paralelo ascienden a unos 70 billones de dólares, no muy lejos de los 72.1 billones del producto interno bruto mundial en 2013.
Es bastante grande
, dijo a la prensa Gaston Gelos, jefe de la División de Análisis Financiero Global del FMI. Es muy importante entender lo que está pasando ahí para ser capaz de evaluar los riesgos
.
EU, el más expuesto
Según el reporte, Estados Unidos es el país más expuesto (entre 15 y 25 billones de dólares), seguido de la zona euro (entre 13.5 y 22.5 billones) y los países emergentes (7 billones), indica el reporte sobre estabilidad financiera.
En los países en desarrollo la banca paralela ha crecido sobre todo en China, donde los bancos enfrentan controles en los tipos de interés, llevando a los ahorristas a buscar mejores rendimientos en bancos externos.
El FMI estima que la banca paralela asciende al 35-50 por ciento del producto interior bruto, y subraya que el sector necesita un seguimiento cercano. Los bancos en la sombra han tendido a prosperar cuando las regulaciones bancarias estrictas se ponen en marcha, lo que lleva a una evasión de las normas
, destacó Gelos.
Este mercado también prospera en un entorno financiero de bajos tipos de interés en los grandes países industrializados, que lleva a los inversionistas a buscar rendimientos más elevados
. Según el FMI, la banca paralela puede ser beneficiosa para estimular la actividad en países emergentes donde el sector bancario tradicional está limitado por sus capacidades
o por los obstáculos regulatorios
.
Pero también conlleva riesgos
si los inversionistas reclaman su dinero simultáneamente, ya que los actores de este mercado podrían ser incapaces de reembolsarlo y de vender rápidamente sus cuentas de crédito, dice el informe de FMI.