Dos de cada tres jóvenes que cursan el bachillerato tecnológico en México se insertan en ocupaciones de muy baja productividad, mientras 72 por ciento se concentran en especializaciones con altas tasas de desocupación y bajos niveles de ingreso, afirmó Rodolfo Tuirán Gutiérrez, subsecretario de Educación Media Superior.

Tras exhortar a la cúpula empresarial a impulsar un cambio de paradigma educativo que permita mejorar las habilidades y competencias profesionales que se imparten a miles de jóvenes en planteles públicos tecnológicos, anunció que la Secretaría de Educación Pública (SEP) impulsará la modificación de la Ley Federal del Trabajo para crear la figura de aprendiz, lo que requerirá de consensos con las cámaras empresariales, sindicatos y legisladores.

También anunció que en el último trimestre del año podrían definirse modificaciones al marco curricular común del bachillerato para determinar nuevas competencias y quizás eliminar otras, así como definir los mecanismos de evaluación para determinar qué jóvenes están adquiriendo estas habilidades y bajo qué nivel de dominio.

Bajos salarios

Destacó que siete de cada 10 jóvenes que egresan del bachillerato tecnológico con especialidades en ingeniería mecánica, electrónica y tecnológica, ciencias de la computación, manufacturas y procesos, negocios y administración, y servicios de seguridad, enfrentan altas tasas de desocupación y bajos salarios.

En contraste, dijo, sólo 12 por ciento logran colocarse en campos que ofrecen mejores salarios y posibilidad de ser empleado, como educación, salud y servicios de transporte, mientras 11.7 por ciento de los egresados menores de 22 años con formación profesional técnica alcanzaron una tasa de desocupación de 11.7 por ciento en el segundo trimestre del año.

En entrevista, luego de dictar una conferencia magistral por el 35 aniversario del Consejo Nacional de Educación Profesional Técnica (Conalep), aseguró que la modificación a la norma laboral es una propuesta menor, básicamente para dar cabida a la figura de aprendiz.

La reforma más importante, dijo, es en materia educativa, con la publicación en los próximos días del acuerdo secretarial para la aplicación del Modelo Mexicano de Formación Dual (MMFD), con el que se busca que los jóvenes que cursen el bachillerato tecnológico permanezcan entre uno y dos años en las empresas durante el curso de sus estudios de educación media superior.

Esta medida, afirmó, estará acompañada de un memorando de entendimiento con el gobierno de Alemania –de donde proviene el modelo dual de formación tecnológica–, a fin de ampliar la cooperación técnica para esclar el MMFD en distintos subsistemas, y determinar una hoja de ruta en la construcción de consensos con la iniciativa privada y los sindicatos.

Durante su exposición ante alumnos del Conalep reunidos en la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra), Tuirán Gutiérrez señaló que, pese a ser una sociedad más educada, con 8.9 años de escolaridad promedio, la productividad de los trabajadores no se ha elevado de manera significativa en 20 años.

Destacó que los jóvenes que cursan estudios de bachillerato tecnológico se concentran en actividades con altas tasas de desocupación y bajos ingresos, es decir, egresan, pero no valorizan su certificado de educación media superior porque no reúnen las competencias que exige el mercado laboral.