Con la victoria sobre el América callamos muchas bocas, consideró Daniel Ludueña, y destacó la labor del nuevo timonel Guillermo Vázquez, quien nos está inyectando volver a creer en nosotros. Sabe cómo sacar lo mejor de cada jugador y Pumas está regresando a las bases, recuperando la garra y el buen futbol. El equipo vuelve a ser el de antes: aguerrido y peleando todas las pelotas.

El Hachita resaltó el triunfo conseguido en el Azteca porque no hubo diferencia con el superlíder, jugamos de igual a igual, y aunque admitió que la jugada del gol fue afortunada, los tres puntos se quedaron aquí.

Vencer a las Águilas fue algo lindo porque muchos no confiaban en nosotros, pero aquí siempre creímos que tenemos un buen grupo para salir adelante, señaló.

Pidió a la afición que siga creyendo en el equipo y ahora la meta será que Ciudad Universitaria vuelva a ser una cancha invencible.

Ludueña tuvo palabras de agradecimiento para los seguidores auriazules, que se han portado magníficamente conmigo y yo en la cancha he tratado de darles alegría. La felicidad de ellos me llega y el cariño es mutuo.

A la conferencia de prensa en el México 68 acudió también Martín Romagnoli, quien habló de su nueva condición de suplente con la llegada de Vázquez, pero se refirió también al pacto de caballeros de los dirigentes.

El argentino mostró su apoyo a los nuevos integrantes de la Comisión del Jugador, quienes pretenden erradicar ese acuerdo.

México es el único lugar en el que existe ese pacto, pero se priva la libertad de trabajo al futbolista, por lo que no debería existir y en la comisión se habla de quererlo cambiar, expresó.

Romagnoli, titular indiscutible en Toluca y en la UNAM hasta antes de la llegada de Memo, admitió sentirse un poco raro al ser mandado a la banca.