Será una celebración para todo el sistema iberoamericano de estudios superiores
Mediante memorando de entendimiento firmado con la UNAM y el Instituto Cervantes extenderá el certificado internacional de español en línea, anuncia su rector, Daniel Hernández Ruipérez
Lunes 1º de septiembre de 2014, p. 36
La Universidad de Salamanca (USAL) es la más añeja de Iberoamérica y base para la construcción de las más importantes casas de estudios de habla hispana en América Latina. En cuatro años celebrará su octavo centenario y, al mismo tiempo se prepara para enfrentar los retos del siglo XXI, entre ellos conservar su tradición, pero a la vez innovar para mantener la esencia universitaria: la creación y transmisión del conocimiento.
En entrevista, el rector de esta casa de estudios, Daniel Hernández Ruipérez, aseveró que si una institución académica no innova no sobrevive, y menos por 800 años
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La USAL fue fundada en el año 1218 por el rey Alfonso IX de León, por lo que es considerada la más antigua de las universidades hispanas. Hoy es una de las más importantes casas de estudios de España. Cuenta con una matrícula de 30 mil estudiantes (26 mil de grado y el resto en posgrado), 2 mil académicos e investigadores y mil 100 trabajadores.
En sus 26 escuelas, facultades y centros, así como en sus 12 institutos, se imparten 74 carreras, 69 maestrías y 39 doctorados. Es una de las instituciones académicas que nombra a sus autoridades mediante la elección directa, en la que todos (profesores, estudiantes y trabajadores) votan, aunque es un sufragio ponderado, pues el peso por sector es distinto.
Durante los trabajos del tercer Encuentro Internacional de Rectores Universia –que se efectuó en Río de Janeiro, Brasil, los pasados días 28 y 29 de julio, donde participaron más de mil 100 dirigentes universitarios y que contó con el apoyo de Banco Santander–, el rector Hernández Ruipérez abrió un espacio en su apretada agenda para recibir a La Jornada.
En la charla, sostuvo que los 800 años de la USAL no deben ser únicamente una celebración de esa casa de estudios, sino de todo el sistema universitario iberoamericano. Asimismo, consideró que la mejor manera de festejarlos será con la suscripción del Espacio Iberoamericano del Conocimiento.
–La USAL está cerca de cumplir ocho siglos de existencia. ¿Qué representa este hecho para su comunidad universitaria de España y de Iberoamérica?
–Pensamos que no sólo es una conmemoración exclusiva de Salamanca, sino de un sistema universitario, que sería el español y también del latinoamericano de habla española, pues se celebran nada menos que 800 años de formación universitaria, de creación y transmisión del conocimiento, de cultura y de investigación. Es un gran acto conmemorativo, pero a la vez hay una gran responsabilidad y compromiso hacia el futuro con nuestras sociedades.
–¿Cómo se ha dado la evolución de la USAL? ¿Cuál ha sido la clave para mantenerse vigente por cientos de años?
–Las universidades siempre tienen que innovar; no se puede sobrevivir tanto tiempo sin innovar, sin adaptarse a los nuevos retos que cada era trae consigo, sin proponer desde las propias casas de estudios nuevos mecanismos y sistemas que nos permitan ser mejores en lo que siempre ha sido el propósito de la universidad: la creación y transmisión del conocimiento. Y esto se ha ido modificando poco a poco en su forma, mas no en su fondo.
Hoy las misiones de la universidad son la docencia, la investigación, la difusión de la cultura, la transferencia del conocimiento al sector productivo y, por tanto, el compromiso con el desarrollo económico y social de las sociedades que la albergan; pero se mantiene la idea básica. Y al igual que cambian las misiones, cambian los medios; hoy tenemos que estar más atentos a los mecanismos de docencia y de transmisión a distancia, a las nuevas tecnologías, que no dejan de ser de nuevos instrumentos y herramientas para hacer lo que siempre hemos tenido que hacer: crear juntos conocimiento
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Urge defender nuestra lengua, hablada por más de 400 millones de personas en el mundo. Es un activo importantísimo y el vehículo de una gran comunidad cultural. Es un extraordinario activo que no podemos desperdiciar, señaló en entrevista con La Jornada el rector de la casa de estudios fundada en 1218Foto Cortesía de la Universidad de Salamanca
–¿Cuál es su relación con las universidades de América Latina, particularmente con las mexicanas?
–La USAL tiene un compromiso de internacionalización desde casi sus primeros momentos, y es muy fuerte con las universidades latinoamericanas. Más de 50 casas de estudios de esa región se fundaron bajo nuestros estatutos. Para nosotros eso representa una responsabilidad histórica y un compromiso, por lo que colaboraremos en lo que se nos necesite. Hoy vemos con legítimo orgullo cómo algunas de las universidades que se crearon en aquel momento imitando el modelo de Salamanca se convierten en las principales en lengua española, las más potentes y prestigiosas.
“Una de las grandes instituciones de las que hablo es la Universidad Nacional Autónoma de México, creada a partir de la Universidad Pontificia de México, que se fundó en 1553.
En 1910, cuando surge la Universidad Nacional de México (hoy UNAM), se reconoce el papel de la USAL y la nombra como una de sus universidades madrinas, junto a la Sorbona, París, y a la de Berkeley, California. Y es tal el apego que cuando la UNAM celebra su primer centenario, en 2010, la institución salmantina está presente en los festejos, en un lugar de privilegio.
–¿Los 800 años son un punto de llegada o de partida?
–Me gustaría que esa conmemoración fuera un punto de partida. Así como los 900 años de la Universidad de Bolonia (fundada en el año 1088) fueron el escenario para la firma de la Carta de Bolonia, que dio origen al Espacio Europeo de Educación Superior, confío que en los 800 años de Salamanca, en 2018, se logre concretar la creación del Espacio Iberoamericano de Educación Superior.
–Siendo la primera universidad de habla hispana, ¿también promoverían un acuerdo iberoamericano para defender y promover el español?
–Una de las fortalezas de la USAL es la formación en español como lengua extranjera. Somos la universidad que, junto con el Instituto Cervantes, prepara y certifica en esta materia. Y acabamos de firmar un memorando de entendimiento entre la UNAM, el Instituto Cervantes y USAL para poner en marcha un certificado internacional del español en línea; nuestra intención es que éste sea el certificado de referencia para todos los que no son hispanohablantes.
“Naturalmente que urge defender nuestra lengua, que es hablada por más de 400 millones de personas en el mundo, es un activo importantísimo, el vehículo de una gran comunidad cultural y en el futuro debe serlo de una gran comunidad económica.
En España estamos acostumbrados a pensar el español como algo nuestro que luego hablan otros, pero no, hoy somos periféricos. Hay que mirar el mapa del español: el gran país es México, la segunda nación hispanohablante es España, pero en muy pocos años será Estados Unidos, y luego Argentina. España hoy es periférica dentro del español, en sus modos, sus acentos y sus formas de expresarse, y tenemos que estar ahí, con todos, porque éste es un extraordinario activo que no podemos desperdiciar
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