El fenómeno migratorio en México es complejo y su atención requiere un enfoque de derechos humanos que incluya el fortalecimiento de las capacidades de los funcionarios del área, así como la participación de la sociedad civil en la formulación, diseño y aplicación de las políticas públicas en la materia, indicó Felipe González, relator especial sobre los derechos de los migrantes de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).

En el informe que ayer entregó al gobierno federal, también reconoció las acciones legislativas emprendidas por el gobierno mexicano para asegurar el respeto a las garantías fundamentales de las personas que ingresan a territorio nacional, resaltaron las secretarías de Gobernación y de Relaciones Exteriores.

En un comunicado conjunto dieron cuenta de la entrega del informe Derechos humanos de los migrantes y otras personas en el contexto de la movilidad humana en México, a Mercedes del Carmen Guillén Vicente, subsecretaria de Población, Migración y Asuntos Religiosos de Gobernación.

El documento contiene los resultados de la visita que hizo el relator González a México en julio de 2011 e incluye información recibida por la CIDH entre 2008 y 2013.

Durante la entrega, la funcionaria de Gobernación ratificó el interés del gobierno federal por trabajar de modo conjunto con los países de la región, con base en el principio de responsabilidad compartida, para promover políticas que brinden la oportunidad a los connacionales de permanecer en sus países de origen, faciliten los flujos regulares, garanticen la protección de los derechos humanos de las personas migrantes y permitan atender a grupos en situación de particular vulnerabilidad.