Fortaleza, Brasil, 15 de julio.

El nuevo banco de desarrollo creado por los gobiernos de los países BRICS se convertirá en una fuente alternativa de financiamiento para que las naciones del bloque tengan acceso a recursos que permitan avanzar en sus políticas sociales, aseguró la presidenta brasileña Dilma Rousseff.

La sede del banco de desarrollo estará en Shanghai, China, pero tendrá un mecanismo de gobierno y toma de decisiones que repartirá responsabilidades entre los cinco miembros.

El capital comprometido será de 100 mil millones de dólares, con una aportación inicial de 50 mil millones de dólares, realizada a partes iguales por los cinco. El primer presidente del consejo de gobernadores –integrado por los jefes de los bancos centrales o ministros de finanzas– será Rusia; el primer presidente del consejo de administración será un brasileño, y el primer presidente del banco, un funcionario de India.

La institución tendrá una oficina regional en Sudáfrica, abierta al mismo tiempo que la sede central. Habrá subsedes en Brasil, Rusia e India. La orden de rotación de los presidentes será: India, Brasil, Rusia, Sudáfrica y China.