Con el nivel de presupuesto y deuda que enfrenta Petróleos Mexicanos (Pemex) tardaría 200 años en extraer las amplias reservas de hidrocarburos contenidos en el subsuelo nacional. La empresa paraestatal consideró ayer en la Cámara de Diputados que esos recursos se deben aprovechar monetizándolos para invertirlos en el desarrollo de la República.

Mario Beauregard, director corporativo de Finanzas de Petróleos Mexicanos, y Gustavo Hernández, director de Pemex Exploración y Producción, se reunieron con las Comisiones Unidas de Presupuesto, Hacienda y Energía de la Cámara de Diputados para exponerles las ventajas que encierra la reforma energética. Ésta, adujo Beauregard, permitirá a la empresa, con el impulso de la producción, convertir en ingresos los abundantes hidrocarburos existentes en el subsuelo de varias regiones del país.

‘‘Si Pemex sólo tuviera que sacar (las reservas) a nivel de presupuesto y con la deuda que enfrenta, nos tardaríamos 200 años en extraer los hidrocarburos. En 200 años, yo les juro que el petróleo va a pasar a la historia. En 200 años habrá otro tipo de energías. Es hoy en día cuando tenemos que aprovechar para sacar esos recursos y para invertirlos bien. Es por eso que es tan importante el fondo petrolero, porque si bien vamos a maximizar esta monetización de los recursos, una vez que se cubra con ciertas obligaciones el resto se va a ahorrar en este fondo.’’

Nuevo régimen fiscal

El director de Pemex Exploración y Producción refirió a los legisladores que el nuevo régimen fiscal que se incluye en la propuesta de reforma reglamentaria en materia energética permitirá fortalecer a a la empresa con mayor autonomía de gestión, un gobierno corporativo y la posibilidad de aliarse con quien sea más conveniente en aquellos proyectos que así lo requieran.

Gustavo Hernández señaló que México tiene un gran potencial petrolero, pues cuenta con reservas y recursos prospectivos en tierra y mar, en aguas someras y profundas, con los diferentes tipos de hidrocarburos: crudo, extra pesado, pesado, ligero y súper ligero, condensados, gas húmedo y gas seco.

Ambos funcionarios describieron los regímenes fiscales más atractivos para el fomento de la inversión en el sector de hidrocarburos. Entre ellos, la carga fiscal total competitiva ofrecería a la paraestatal la posibilidad de competir en temas específicos, como el de aguas profundas y gas.

En la medida de riesgo de cada actividad se ofrecen regímenes fiscales con menor carga fiscal para actividades de mayor riesgo, o de mayor intensidad de capital que requieren mayor inversión por barril, por ejemplo aguas profundas, aceite y gas en lutita, aceite extra pesado, recuperación mejorada y secundaria, entre otros.

Los mismos regímenes contemplados en la iniciativa del gobierno federal presentan incentivos impositivos para que las compañías realicen inversiones de riesgo exploratorio.