La fiebre futbolera no sólo llenó los espacios libres de las negociaciones entre ministros y presidentes de los países que conforman la Alianza del Pacífico. También fue parte de los discursos oficiales. Inclusive algunas de los acuerdos y propuestas a futuro se pulieron frente a los televisores que transmitieron los juegos del Mundial, en el hotel sede de la novena Cumbre de la Alianza.

Si el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, cedió a su homólogo de México, Enrique Peña Nieto, la presidencia pro témpore del mecanismo, al recordarle en el discurso inaugural que con este encargo pasa usted a la delantera, a meter los goles, el mandatario mexicano recurrió también al lenguaje deportivo al recibir este encargo y confió en que tanto en la Alianza como en el balompié, México sí anote goles.

“Y para hacer referencia a lo que ha dicho el presidente de Colombia, espero que México, además de hacerlo en el futbol –este lunes tenemos el partido que espero permita, como ya ha ocurrido con Chile y Colombia, pasar a la siguiente fase de la Copa– que empiece anotando goles y muchos más en esta presidencia pro témpore”, respondió Peña Nieto a Santos, luego de que ambos tuvieron que suspender una salida al campo de golf. No se pudo, dijo el mandatario colombiano tras ofrecer una conferencia de prensa.

Ayer, mientras los presidentes revisaban los avances de la Cumbre, la embajadora de Costa Rica en México, Gabriela Jiménez, y un grupo de ticos, seguían las incidencias del partido de su equipo contra Italia.

Algo así sucedió la víspera, cuando los secretarios de Relaciones Exteriores, José Antonio Meade, y de Economía, Ildefonso Guajardo, acompañados de los cancilleres de los países de la Alianza, decidieron suspender actividades para ver el cotejo de Colombia contra Costa de Marfil.

Al final de la cumbre, la presidenta de Chile, Michelle Bachelet, también deseó suerte a la selección mexicana y auguró que pasaría a la segunda fase del Mundial.

Las felicitaciones se extendieron al canciller Meade, quien mostró sus habilidades como portero el pasado miércoles, impidiendo anotaciones en la meta del improvisado equipo mexicano de futbol de playa, en el partido que sostuvieron con funcionarios de otras delegaciones.

Ni por cortesía diplomática se dejó meter un gol, lamentaron los ministros y viceministros de Chile, Perú y Colombia.