Curitiba, 16 de junio.

Irán y Nigeria empataron (0-0) este lunes en Curitiba en el duelo más aburrido hasta ahora en el Mundial y el primero que terminó en tablas y sin goles, lo que permite a Argentina liderar el grupo F con tres puntos, tras ganar el domingo a Bosnia (2-1).

El partido se anunciaba nivelado entre dos selecciones que ocupan el puesto 43 (Irán) y 44 (Nigeria) del listado de la FIFA, pero el público esperaba más de ellos y los despidió con una sonora rechifla al final del encuentro.

El primer tiempo mostró a una selección nigeriana más ambiciosa, con cinco disparos a puerta, dos de ellos entre los tres palos, frente a uno de Irán. Los africanos tenían 64 por ciento de posesión, frente a 36 por ciento de los asiáticos en esos 45 minutos iniciales.

Tras la reanudación siguió la misma pauta y los bostezos se contagiaron entre los 39 mil espectadores del Arena da Baixada que en ocasiones pedían a los jugadores más ambición.

Al equipo persa se le notaba su inexperiencia a escala internacional, con seis jugadores que militan en la liga iraní, y sólo cinco en el extranjero, entre ellos Javad Nekounam, ahora en la liga kuwaití, pero que estuvo seis temporadas en el Osasuna español.

Los otros jugadores destacados del equipo, los delanteros Ashkan Dejagah (Fulham) y Reza Ghoochannejad (Charlton Athletic), que juegan en Inglaterra, tampoco se dejaron ver mucho, aunque el segundo tuvo una buena oportunidad en el minuto 34, que desbarató el portero Vincent Enyeama.

Aunque la ocasión más clara del encuentro fue al minuto 69, cuando el nigeriano Shola Ameobi se coló entre las espaldas de un par de zagueros iraníes, después de un centro largo, pero apenas alcanzó a rozar el balón cuando tenía el segundo poste a su disposición.

Esas dos aproximaciones fueron lo único que ofreció el encuentro, además de la retahíla de choques, pases errados, tiros desviados y faltas que cortaron constantemente las acciones.

La selección nigeriana, con 11 hombres actuando en el extranjero, y el centrocampista John Obi Mikel (Chelsea) como jugador más conocido, dominó pero Irán siempre se replegó bien y no dejó espacios.

Nigeria, que logró llegar a octavos en Estados Unidos en 1994 y en Francia en 1998, y quedó eliminada en la primera fase en Corea del Sur y Japón en 2002 y en Sudáfrica 2010, espera en su quinta participación llegar por lo menos a cuartos por primera vez, aunque deberá mostrar más capacidad si quiere lograrlo. Su siguiente rival será Bosnia.

El equipo africano ha sido tres veces campeón continental y una vez oro olímpico (Atlanta 1996), además de ganar la plata en Pekín 2008, sin llegar nunca a plasmar esos resultados en un Mundial.

Irán, por su parte, que terminó con su valla en cero por primera vez en su historia de los mundiales, nunca ha superado la primera ronda en sus tres participaciones anteriores: Argentina 1978, Francia 1998 y Alemania 2006.

Jugará su segundo partido el sábado contra Argentina, que puede respirar tranquila al menos en la fase de grupos: ninguno de sus dos próximos rivales debería suponerle mayores dificultades.