Felicidad incompleta
añana concluye una nueva edición del principal festival de cine y el mayor mercado de películas del mundo, el de Cannes. A la par que abre a unos cuántos las puertas de la fama, escenifica cada año polémicas y decepciones. Como la película Grace de Mónaco, más color rosa que historia; o Captives, la más reciente de un director con fama de exigente: Atom Egoyan. Esta vez hubo una ausencia notable en la ciudad francesa que mueve cantidades industriales de dinero y acoge todo el lujo posible, estrellas, alfombras rojas, la ropa más exclusiva de los diseñadores y el alquiler de joyas por miles de dólares: el príncipe Azim Haji Bolkiah.
Desconocido para la inmensa mayoría de los mortales, sin embargo es muy estimado en ciertos círculos del dinero y el glamour de Hollywood y nota destacada en las revistas del corazón y el espectáculo. En ellas suele aparecer acompañado de famosas de la pantalla, como Scarlett Johansson, Sofía Loren, Pamela Anderson, Joan Collins o Faye Dunaway. Y es que, además de poseer 4 mil millones de dólares, Azim Haji acaba de incursionar en la industria cinematográfica. Precisamente en Cannes presentó su primera producción: You’re not You, basada en una novela de Michelle Wildgen y protagonizada por Hillary Swank, All Larter y Josh Duhamel. La dirige George C. Wolfe.
Alguien tan dado a las galas como el príncipe no pudo atestiguar el estreno de su película por causa de su padre, Assanal Bolkiah, quien gobierna Brunei, el sultanato en el sur de Asia con 400 mil habitantes y una extensión territorial menor que Tlaxcala. Un paraíso natural con enormes yacimientos de gas y petróleo.
Y es que el sultán y padre del príncipe más derrochador del planeta está en medio del rechazo generalizado, y en especial de la comunidad fílmica y los grupos que defienden los derechos humanos, por imponer una nueva legislación a sus súbditos. En ella se condena a muerte por lapidación o a varios años de cárcel a los homosexuales; y a flagelación a las adúlteras. Igualmente se castiga con severidad el robo y el aborto.
El sultán es inmensamente rico, con inversiones en Estados Unidos, Italia, Inglaterra y Francia. Posee lujosas cadenas de hoteles, contra las cuales el medio artístico y de la moda decretó un boicot en protesta por la nueva legislación.
Ese boicot no toca los intereses cinematográficos de Hazim Haji, lo que explica la presencia de su película en Cannes y sus proyectos futuros. Como Dark Places, que protagonizará Charlize Theron. Cabe agregar que pocos como él en dilapidar y presumir fortuna. A Mariah Carey le pagó 1.5 millones de dólares por interpretarle en privado apenas tres canciones. Pero no hay felicidad completa: el príncipe ya no podría vivir tranquilo en Brunei pues su papá castiga cruelmente la homosexualidad.