Jueves 22 de mayo de 2014, p. 35
Cercado por la policía capitalina y sin servicio de energía eléctrica anocheció ayer el poblado de San Bartolo Ameyalco, donde persiste la tensión entre los habitantes, luego de que el Sistema de Aguas de la Ciudad de México (Sacmex) y la delegación Álvaro Obregón reiniciaron los trabajos para concluir la instalación de una red hidráulica, que ha generado el rechazo de un grupo de personas.
Desde principios de año, cuando empezó el proyecto para suministrar agua potable, los pobladores se dividieron entre quienes apoyan la obra y quienes la rechazan, como ayer quedó evidenciado, pues mientras en el camino viejo a Mixcoac el personal del Sacmex introducía las tuberías ante la mirada curiosa de quienes serán abastecidos, en el otro extremo, sobre la calle Francisco I. Madero, se desató la trifulca con los granaderos.
Aunque las autoridades delegacionales lo han negado, los inconformes aseguran que la conexión hidráulica llegará hasta un manantial para distribuir el líquido al complejo comercial de Santa Fe.
El pueblo no se niega a dar agua a sus habitantes, pero lo que pretenden es entubar el manantial para dar servicio más allá de la parte baja
, aseguró Bernardo Padrón, vecino del lugar, quien se quejó de que a tres meses del primer enfrentamiento, la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal no ha tomado cartas en el asunto.
Los vecinos aseguraron que las autoridades sólo se han acercado con quienes resultan beneficiados. Dicen que sólo es un grupo en contra, pero si los pobladores estuvieran de acuerdo con la obra no hubieran salido a las calles. Nos están tratando como delincuentes y eso no se vale
, apuntaron, y señalaron que el compromiso era no reiniciar los trabajos hasta llegar a un consenso, lo cual no se cumplió.
Los trabajos seguirán: Luna
A su vez, otro grupo de habitantes dieron su apoyo al proyecto delegacional, al señalar que ya están cansados de pagar hasta mil 500 pesos por una pipa de agua. Consideraron que detrás de la oposición vecinal se encuentran los piperos, que verían caer su negocio.
En tanto, el jefe delegacional, Leonel Luna, señaló que se continuarán los trabajos para concluir la red hidráulica, que beneficiará a 20 mil habitantes, tras asegurar que se privilegió el diálogo y la tolerancia hasta el último momento.
Ellos dicen que las obras son para surtir agua a Santa Fe, lo cual es falso. Incluso nos hicieron escarbar para comprobar hacia dónde van los ductos. El proyecto es independiente al manantial y lo vamos a continuar, porque así lo está pidiendo un grupo de pobladores y porque es responsabilidad del gobierno dotar de infraestructura que permita cumplir con un derecho humano básico
, apuntó.
Explicó que se pidió la presencia de la fuerza pública para evitar un enfrentamiento entre los pobladores y resguardar la integridad de los trabajadores.