El Estado mexicano, obligado a instrumentar programas de educación sexual
Miércoles 14 de mayo de 2014, p. 44
El Estado mexicano está obligado a instrumentar programas de educación sexual para combatir el embarazo entre niñas y adolescentes, pues sólo en 2012 se reportaron 11 mil en jóvenes de entre 10 y 14 años.
Al comienzo de la campaña promovida por la Cámara de Diputados, cuyo lema es Recuperando oportunidad. Prevención del embarazo adolescente
, se informó que la precaria información y los escasos programas de enseñanza reproductiva propiciaron que en México 19.2 por ciento de los 2.2 millones de personas que nacieron en 2012 fueran producto de embarazos de jóvenes de entre 15 y 20 años.
El Censo de Población y Vivienda de 2010, elaborado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), registró que en México vivían 22 millones de personas de entre 10 y 19 años, cifra que representa 19 por ciento de la población. La institución, en un censo específico de 2012, descubrió que dos de cada 10 jóvenes de entre 12 y 19 años ya habían iniciado su vida sexual.
Verónica Juárez, presidenta de la Comisión de los Derechos de la Niñez en San Lázaro, dijo que el Inegi también descubrió que de los 2.2 millones de personas que nacieron en México en 2012, 19.2 por ciento fue producto de embarazos de jóvenes de entre 15 y 20 años.
Además, un dato de suma relevancia que se dio a conocer ayer en la Cámara de Diputados es que en 88 por ciento de embarazos de niñas y adolescentes, los padres son mayores de edad. Ello significa que hombres con ventaja de edad y condición física mantienen relaciones sexuales con niñas y jóvenes en distintas zonas del país.
La representante en México del Fondo de Población de Naciones Unidas, Leonor Calderón, resaltó que de mantenerse la tendencia creciente de embarazos infantiles y juveniles, la incidencia podría crecer de manera dramática. Recordó que cada día, en el planeta, ocurren 20 mil nacimientos. Se trata de embarazos de menores de 18 años. Ello, sólo esto en los países en vías de desarrollo.
En el caso de las niñas de entre 10 y 14 años que son mamás en México, corren el riesgo de padecer daños graves en su salud, sobre todo enfermedades relacionadas con hipertensión, anemia, partos prematuros (posteriormente) y muerte materno-infantil.
Sobre el particular, los diputados promoventes de la campaña consideraron necesario impulsar las iniciativas –que ya se encuentran en el Congreso– para aumentar la edad para contraer matrimonio.
La legisladora Juárez manifestó que es necesario equiparar el delito de estupro con el de violación sexual, para sancionarlo con la misma pena. El primero, definido como la relación sexual de un adulto con una menor de 18 años y mayor de 15, se sanciona con cárcel de tres meses a cuatro años. Incluso, en gran cantidad de casos el delito se exime si el mayor de edad (hombre) se casa con la menor.