Miércoles 23 de abril de 2014, p. 31
Guadalajara, Jal., 22 de abril.
Este martes, aniversario número 22 de la tragedia por explosiones de gasolina en el drenaje del sector Reforma de Guadalajara, que dejaron oficialmente 210 muertos y cientos de heridos, el gobernador Aristóteles Sandoval Díaz anunció una inversión de 5 millones de pesos en favor de los integrantes del fideicomiso de damnificados, que éstos calificaron como intento de finiquitar un grupo que insiste en que las autoridades no les ofrecen apoyo integral.
Sandoval Díaz indicó que, además de los beneficios que ya tienen los 64 miembros del fideicomiso, habrá un servicio funerario de mejor calidad
y se revisará el ahorro en los seguros de vida de los integrantes, para que les sea entregado ese dinero.
La organización no gubernamental 22 de Abril realizó actos en memoria de la tragedia, y aseguró que faltan al menos 20 casos de ser integrados al fideicomiso. La presidenta de la ONG, Lilia Ruiz Chávez, dijo que hace unos días, en mesas de trabajo con el gobierno estatal, se les ofrecieron 200 mil pesos para finiquitar el fideicomiso, que administra magras pensiones y beneficios para quienes fueron víctimas directas.
Cuatro implicados en la tragedia tienen cargos en el gobierno
A más de dos décadas de la tragedia, cuando 11 kilómetros de drenaje explotaron por una fuga de gasolina, cuatro funcionarios del gobierno estatal que fueron procesados y estuvieron en prisión por lo ocurrido tienen de nuevo bajo su responsabilidad la seguridad en el subsuelo de Guadalajara y ocupan cargos relevantes en la nómina estatal.
A la cabeza del grupo que regresó a la administración estatal está Enrique Dau Flores, actual miembro de la consejería de Aristóteles Sandoval y presidente del consejo de administración de la Comisión Estatal del Agua. Dau Flores fue edil de Guadalajara por unos días en 1992, y fue obligado a renunciar tras las explosiones. Meses después fue detenido y enviado al penal de Puente Grande.
Aristeo Mejía Durán, hoy director del Sistema Intermunicipal de Agua Potable y Alcantarillado (Siapa), que abastece a Guadalajara, Zapopan, Tlaquepaque y Tonalá, tenía ese cargo en 1992, por lo que fue encarcelado. Otro procesado, Manuel Jiménez López, quien el año de las explosiones era gerente de uso eficiente del agua en el Siapa, hoy se encarga de la operación de ese organismo. También en 2014 está en el mismo cargo que en 1992 Jorge Humberto Hupizar Herrera, gerente de control de calidad del agua del Siapa.