El nivel de la base monetaria, constituida por todos los billetes y monedas en circulación, registró una disminución de casi 47 mil millones de pesos en el transcurso de este año, a pesar de que unos días antes del inicio del periodo vacacional de Semana Santa fueron introducidos más de 12 mil 100 millones para atender la demanda de dinero en efectivo de la población, indica un reporte del Banco de México (BdeM).

De acuerdo con el reporte monetario del banco central, se estima que este comportamiento es congruente con el patrón estacional de la demanda por base monetaria. Pero la menor cantidad de dinero efectivo en circulación se presenta en el marco de un laxo desenvolvimiento del mercado interno y parece responder, también, a otros factores económicos.

Según al análisis que sirvió de base a la discusión de la junta de gobierno para la decisión de política monetaria a finales de marzo, los reportes oportunos sobre el desenvolvimiento económico del país durante el primer trimestre de 2014 sugieren una desaceleración en el ritmo de crecimiento de la actividad económica.

En particular, precisó el análisis, después de haber presentado un crecimiento trimestral desestacionalizado de 0.95 por ciento en el tercer trimestre de 2013, en el último trimestre del año el producto interno bruto (PIB) exhibió una variación de sólo 0.18 por ciento. Por su parte, las exportaciones manufactureras no han mostrado un cambio de tendencia favorable. En particular, aquellas destinadas a Estados Unidos se han visto recientemente afectadas, en parte, por las condiciones climáticas adversas en ese país.

En cuanto al comportamiento del mercado interno, el análisis señaló que el estancamiento que han registrado las ventas de la Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio y Departamentales (Antad) y la trayectoria negativa de las importaciones de consumo no petroleros en los primeros meses de 2014 apuntan a un bajo dinamismo del consumo privado.

De manera relacionada, abundó, el Índice de Confianza del Consumidor registró una disminución importante a principios del año.

La evolución de la demanda interna ha sido abordada también por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) a través de un nuevo instrumento denominado Indicador Mensual del Consumo Privado en el Mercado Interior, el cual mide el comportamiento del gasto realizado por los hogares residentes en el país en bienes y servicios, tanto de origen nacional como importado y del que se excluyen las viviendas y las joyas.

Según los resultados de enero de este indicador mensual, presentados este 14 de abril, el gasto de los hogares en bienes y servicios registró un crecimiento anual de 0.7 por ciento muy abajo de la tasa de elevación de 3.4 por ciento observada en el mismo mes de 2013.

El escaso crecimiento del gasto de consumo de los hogares, detectado primero por los economistas del BdeM, fue corroborado con el reporte del Inegi, el cual especificó que, con cifras desestacionalizadas, el gasto en bienes y servicios aumentó 0.46 por ciento en enero de 2014 respecto al mes anterior. Por sus componentes, precisó, el consumo de bienes y servicios de origen nacional se elevó 0.47 por ciento; mientras los importados, decrecieron 2.09 por ciento.