Nuevo Laredo, Tamps., 5 de abril.

Elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional golpearon y amenazaron con desaparecer a tres reporteros que acudieron a la cobertura de un accidente provocado por personal militar, informó el Comité de Derechos Humanos de Nuevo Laredo ­(Cdhnl).

El reporte del hecho ante la organización no gubernamental fue interpuesto por los reporteros Neftalí Antonio, Mario Mosqueda y Abisai Rubio, a quienes militares les rompieron sus cámaras fotográficas.

Haremos llegar la denuncia a la Comisión Nacional de los Derechos Humanos y a los gobiernos federal, estatal y municipal para que se garantice la integridad de los tres reporteros, señaló Raymundo Ramos Vázquez, presidente del Cdhnl.

El incidente se produjo el viernes pasado cuando alguna de las patrullas 31 y 33, con logotipos de la policía estatal, pero asignada a los soldados que integran el Operativo Seguridad Tamaulipas, chocó contra un autobús urbano en las calles Aquiles Serdán y Mina. Dos militares que resultaron lesionados fueron trasladados al Hospital General por paramédicos de Protección Civil.

Al lugar acudieron los reporteros, que comenzaron a capturar fotos y video. De pronto, un grupo de soldados se abalanzó contra Neftalí Antonio y Mario Mosqueda, tratando de despojarlos de su equipo de trabajo, a la vez que los insultaban y amenazaban.

Abisai Rubio se encontraba metros atrás, documentando la agresión a sus compañeros, pero hasta él llegaron varios soldados, quienes lo golpearon y le rompieron una cámara fotográfica.

Trataron de esposarnos y subirnos a una patrulla, nos decían que nos iban a desaparecer, aunque nosotros nos identificamos como periodistas, señaló Antonio Gómez.

Se me echaron encima, me golpearon, me rompieron la cámara y querían esposarme, afirmó Mario Mosqueda, fotógrafo con más de 35 años de experiencia.

Rubio señaló que estaba tomando video, siete soldados golpeaban a Neftalí y a Mosqueda, nomás sentí un golpe en la espalda y luego otros militares trataban de quitarme mi equipo de trabajo y seguían agrediéndome.

Testigos dijeron haber visto cómo el chofer del camión urbano chocado era bajado a golpes, insultado y detenido por los soldados responsables del percance.

Otros reporteros que acudieron al lugar del percance fueron agredidos verbalmente por el personal militar.