El Consejo General del Instituto Federal Electoral (IFE) acordó aplazar la redistritación en el país, hasta que opere el Instituto Nacional de Elecciones (INE) y su instancia rectora defina los detalles del cambio.

El PRI rechazó la resolución, en tanto que PRD y PAN se manifestaron en favor de que se mantenga la división actual y se estudie el tema hasta después de los comicios de 2015. Los distritos actuales tiene origen en 2005, cuando los consejeros definieron la demarcación territorial de las 300 circunscripciones uninominales federales en que se divide el país.

En ese momento se dijo que la geografía electoral serviría para los procesos 2005-2006 y 2008-2009. Siete años después, en 2013, la junta general ejecutiva del IFE formuló un proyecto de redistritación (con cambios en alrededor de 46 cabeceras), el cual fue devuelto por el Consejo General con el argumento de que en ese momento era discutida una reforma política y se desconocían los pormenores del nuevo escenario.

Posteriormente, la misma junta general informó al consejo que ante los elementos de dicha reforma (aprobada y publicada el mes pasado) no era factible el aval de la nueva división y que el asunto debería analizarse después de las elecciones de 2015.

Este criterio fue presentado y aprobado por unanimidad durante la sesión del viernes, pero provocó división entre los representantes de los partidos en el consejo. El priísta José Antonio Hernandez dijo que no hay argumentos suficientes para dejar de hacer lo que ordena el artículo 53 constitucional, por lo que omitir la obligación de redistritar dañaría el proceso 2014-2015.