Veracruz, Ver., 29 de marzo.

Un chispazo fue suficiente para que Veracruz liquidara 3-1 al Pachuca, pues en tres minutos le encajó un par de goles.

La victoria da nuevos bríos a los Tiburones Rojos en su lucha contra el descenso, al pasar su cociente de 1.0345 a 1.1000, mientras los Tuzos se quedaron con 20 puntos en la tercera posición.

El duelo fue una disputa insistente en ambos lados. Nadie podía imponer un estilo y en la media cancha se libraba una gran batalla.

Pero todo cambió al minuto 11, cuando Cristian Martínez Borja salió disparado rumbo al área rival, adonde envió un centro que Efraín Cortés intentó atajar sin fortuna y terminó propinando un punterazo que envió la pelota al fondo de su propia portería.

Casi al finalizar el primer tiempo, Enner Valencia empató el juego, tras un servicio de Dieter Villalpando, adelantándose a la marca y volando por encima de sus perseguidores para rematar con furia con un testarazo.

Al 69, la expulsión de tuzo Hirving Lozano modificó el escenario y su equipo empezó a exhibir falta de concentración.

Enseguida Veracruz se fue encima. En varios rechazos Jehu Chiapas buscó rematar al arco pero le salió un inesperado pase que rescató Líber Quiñones para el 2-1.

Tres minutos después Martínez Borja escapó desde la media cancha, entró al área, recortó a dos defensas y envió al segundo poste, para el 3-1 definitivo.

El técnico del Veracruz, José Luis Sánchez Solá, informó que Ángel Reyna se perderá lo que resta del torneo, ya que la próxima semana será operado de un mal congénito del riñón.