Actividad débil, señala la firma; prevé repunte en EU y más gasto público en el país
Sábado 29 de marzo de 2014, p. 25
Bank of America-Merrill Lynch recortó este viernes de 3.8 a 3.5 por ciento el pronóstico de crecimiento de la economía mexicana en 2014. La firma argumentó que la actividad se mantiene débil, mientras el país se recupera de la desaceleración de 2013 y el impacto en el gasto de las empresas y personas del incremento de impuestos al inicio de este año.
Aun con el recorte en la expectativa de crecimiento, la firma financiera dijo que continúa previendo que un fuerte crecimiento en Estados Unidos y un más alto gasto público en México sigan siendo los principales motores de una recuperación en la actividad económica de la segunda mitad de 2014.
Este año comenzó con una leve recuperación debido a un consumo privado débil y por impuestos más altos en México, así como un arranque de año en Estados Unidos más lento de lo anticipado.
El gobierno federal espera un crecimiento de 3.9 por ciento.
Legislación secundaria saldrá en mayo, anticipa
Entre los principales riesgos externos que afronta la economía mexicana identificó un crecimiento en el producto interno bruto de Estados Unidos más débil de lo esperado, una normalización desordenada en la política monetaria de ese país y un aterrizaje forzoso en China. Un gasto público menor a lo esperado, una aplicación decepcionante de las reformas y la inseguridad son los principales riesgos internos, abundó.
El Congreso discute las leyes secundarias en material de competencia y telecomunicaciones, y está en espera de que el presidente Peña Nieto envíe las propuestas correspondientes para las leyes energética y electoral, apuntó.
Prevemos que todo esté aprobado en este periodo ordinario de sesiones que termina el 30 de abril. El posible orden de resolución es: competencia, telecomunicaciones, electoral y energía. Como el Congreso tiene mucho que hacer y las negociaciones políticas llevan tiempo, existe la posibilidad de que sea necesario convocar a un periodo extraordinario de sesiones que sucedería en mayo
, consideró.
Se necesita de una mayoría simple de los legisladores presentes en el momento del voto para aprobar la legislación secundaria en cada Cámara.
Conocido por su disciplina partidista
, agregó, el Partido Revolucionario Institucional suma 41 por ciento de cada cámara. Junto con su aliado incondicional, el Partido Verde (PVEM), el tricolor suma una coalición de 48 por ciento de los miembros de cada cámara.
Como resultado, la coalición PRI-PVEM solamente necesita 11 diputados y dos senadores para aprobar las leyes secundarias. Ha sido fácil para el PRI obtener votos extra con el PAN y el PRD divididos, y el partido del sindicato de maestros (Partido Nueva Alianza) vota frecuentemente con el PRI (10 diputados y un senador), aseguró la firma financiera.
De la misma manera, si los legisladores de otros partidos no se presentan a votar, la coalición PRI puede aprobar las leyes por su cuenta, apuntó.