Permanece el poder del cártel, no se atacó la estructura
Domingo 2 de marzo de 2014, p. 8
La manifestación en favor de Joaquín El Chapo Guzmán Loera en Sinaloa muestra que el capo construyó un tejido social para resguardarse y protegerse en su zona de mayor influencia, además de que ante la falta de héroes de demostrada probidad moral y honradez, es posible que se busquen opciones en figuras que son verdugos-benefactores, según investigadores universitarios.
“Existe en la conciencia social la idea de que los políticos son peores. De que están llenos de impunidad, de crueldad (...) Personajes como El Chapo, que salen de la nada, que son analfabetas, hacen que la gente tenga una opción, aunque sea una tan degradada, tan decadente, como es un líder de una banda criminal”, opinó Raúl Villamil Uriarte, profesor investigador de la Universidad Autónoma Metropolitana-Xochimilco.
Sin embargo, para el doctor en antropología social la marcha fue armada
por el cártel, que ahora está utilizando las estrategias de la sociedad civil
para defender a un antihéroe.
Dijo que en estas protestas hay un simbolismo relacionado con cierta subversión en contra de los símbolos nacionales que ya no funcionan
. El Chapo, detalló, encarna al criminal que ha asesinado a mucha gente, pero que es descrito por sus defensores –esta parte de la población benefactora del narcotráfico
– como un bonachón que les da dinero, que los ayuda, que protege a su gente, a Sinaloa. Hay una serie de contradicciones en la idealización y la asimilación de los héroes. Pero con el estado de cosas en México, la situación es verdaderamente interesante, porque los ídolos, los héroes, que tendrían que ser figuras oficiales, de probidad moral, decencia y honradez, no existen
.
Por su parte, René Jiménez Ornelas, coordinador de la Unidad de Análisis sobre Violencia Social del Instituto de Investigaciones Sociales de la Universidad Nacional Autónoma de México, consideró que la gente que salió a manifestarse lo hizo porque el capo les “daba trabajo, aunque fuera de halcones, además de que si por ir a una manifestación también va a haber algún tipo de pago, pues hay que defender al Chapo, según ellos”.
Recordó que dicha movilización no han sido la única, pues también hubo algunas en apoyo a La Familia Michoacana. Esto ilustra cómo los capos favorecen a la población que está cerca de ellos, donde tienen sus residencias, donde es su territorio, porque ellos requieren un tejido social que de alguna manera los pueda resguardar y proteger
.
Más que ser un benefactor para los pobladores, afirmó, El Chapo representaba “un tipo de estabilidad (...) me está dando trabajo. Simplemente por contratarme de halcón me paga”.
El hecho de que la gente dijera que les habían pagado o dado algo a cambio habla “del gran poder económico del cártel. El Chapo está detenido, pero al cártel le hicieron cosquillas; ya debe haber unos cinco para sustituirlo, no se le está pegando a la estructura”.