La Habana, 1º de marzo.

La decimosexta edición del destacado Festival del Habano en Cuba cerró con la tradicional subasta de puros y humidificadores, recipientes para la conservación de los puros convertidos en verdaderas obras de arte, que este año logró recaudar 1.1 millones de dólares. Seis lujosos humidificadores, repletos de los afamados habanos, fueron presentados a la puja, que superó los 1.04 millones de dólares, destinados, como es habitual, al sistema de salud de la isla.

La subasta fue llevada por el británico Simon Chases, quien presentó las hermosas cajas de madera de cedro, con un sistema que mantiene la humedad y un higrómetro para medirla, convertidas en obras artesanales que devienen cada año centro de atención del festival. Los humidificadores son indispensables para conservar habanos en óptimas condiciones de temperatura, entre 16 y 18 grados Celsius, y de humedad relativa, entre 65 y 70 por ciento.

También fueron entregados los Premios Habano del año, galardón que muchos comparan con el Óscar cinematográfico y que desde 1995 constituye un reconocimiento a quienes potencian el tabaco cubano. Los premios fueron a manos del suizo Urs Portmann, en la categoría de Negocios; el belga Ben Vinken, en Comunicación, y el cubano Arnaldo Vichot, en Producción.

En esta edición del Festival del Habano, que se inició el pasado lunes, participaron más de mil 500 hombres de negocios, coleccionistas, productores y celebridades procedentes de 80 países, atraídos por una fiesta anual que celebra la excelencia de los puros Premium, que son los elaborados a mano.

La estrella más conocida de este año fue el cantante británico Tom Jones, quien después de un breve recital dijo sentirse agradecido por la magnífica oportunidad de estar en Cuba.

En ese encuentro, las autoridades tabacaleras cubanas presentaron la vitola H. Upmann No.2 Reserva Cosecha 2010, el momento más esperado por los fumadores asistentes a la cita. El Festival fue dedicado a las marcas Partagás, Hoyo de Monterrey, H.Upmman y Trinidad, fundadas, respectivamente, por un catalán en 1845, un español en 1860, alemanes en 1844 y el estado cubano en 1969. Durante la cita se realizaron maridajes entre las cervezas Duvel, Leffe Brown, Malheur Brut Reserve y Chimay Grande Reserve, todas de Bélgica, y la cubana Bucanero, con puros H. Upmann Half Corona, Hoyo de Monterrey Epicure No. 2 y Partagás Serie D No. 4. El esperado concurso Habano sommmelier fue ganado por el catador español Miguel Antonio Menéndez, una exigente lid que consiste en vincular los puros con alimentos y bebidas, y en la que resultaron finalistas el británico Edward Sahakian, quien ocupó el segundo puesto, y el cubano Andrés Piñón, que terminó tercero. La prueba incluye conocimientos teóricos sobre las diferentes marcas y vitolas del puro cubano, y pruebas prácticas de corte y encendido del habano, catas descriptivas y maridaje con diversas bebidas. También unas 200 personas compitieron por primera vez en un singular torneo por lograr la ceniza más larga de un puro de 17 centímetros, que fue ganado por la cubana Olivia Terry Carvajal, periodista de Radio Cadena Habana, quien, apenas dejó 0.9 centímetros de su habano, sin dejar caer la ceniza. Tras conocer el dictamen de los jueces, hecho público el viernes, la ganadora comentó a la prensa que no pensó en vencer, sólo en degustar un buen puro, algo que hace ocasionalmente.

Este año, el festival mantuvo las visitas, también tradicionales, por Pinar del Río, la provincia cubana más occidental, donde se producen las mejores hojas de tabaco del mundo, y por las fábricas más antiguas de la isla, encabezadas por la H. Upmann, donde se les permitió a los visitantes elaborar tabacos con sus manos. Este es el acto de más lujo y glamour de cuantos se hacen hoy en la isla y al que han asistido personalidades como el premio Nobel de Literatura el colombiano Gabriel García Márquez, el actor y político estadunidense Arnold Shwarzenegger y la modelo británica Naomi Campbell.