La CFE planea construir la hidroeléctrica en San Pedro Ixcatán, poblado serrano de Nayarit
Generará 10 mil empleos en cinco años, dicen partidarios del proyecto; descartan que provoque inundaciones
Domingo 23 de febrero de 2014, p. 27
Ruiz, Nay., 22 de febrero.
La presa hidroeléctrica Las Cruces, que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) pretende construir en el poblado serrano San Pedro Ixcatán, municipio de Ruiz, al norte de Nayarit, afectará la pesca ribereña e inundará al menos 11 sitios sagrados, entre ellos Muxatena, el más importante, por lo cual pobladores de esa región rechazan su construcción.
En una reunión pública de información convocada por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), 884 personas, entre indígenas, campesinos y pescadores se reunieron el jueves pasado para que la CFE les explicara los beneficios del plan integral de construcción de la obra que planea realizar sobre el cauce del río San Pedro, único que corre libre por todo el país.
Los representantes de la CFE dijeron que en la obra se invertirán 7 mil 795 millones de pesos, generará 10 mil empleos en cinco años y está proyectada a 50 años de uso.
Durante casi 10 horas, en la plaza pública de la localidad, los representantes de la CFE ex- pusieron que además de los em- pleos, la presa generará otras obras complementarias, y de entre ellas el empedrado de calles de las poblaciones.
Sin embargo, los argumentos no convencieron a los integrantes del Consejo Intercomunitario por un Río Libre, ni de la organización Sumar o del Centro Mexicano de Derecho Ambiental (Cemda), quienes cuestionaron la deficiente manifestación de impacto ambiental (MIA) que, según investigadores de la Universidad Autónoma de Nayarit, no reflejó un estudio profundo.
José Antonio de la Rosa Juárez, pescador de Palma Grande, municipio de Tuxpan, dijo que sólo en su localidad seremos 427 familias de pescadores afectadas; la presa retendrá el sedimento que ayuda a que el camarón y el pescado se reproduzcan en nuestro espacio, de esa producción vivimos todos
.
Marcos Moreno Torres, de Boca de Camichín, municipio de Santiago Ixcuintla, expuso que ellos extraen cada año mil toneladas de ostión de siembra, más 500 que se dan en bancos naturales de la región y produce mil empleos directos, señaló que la creación de la presa no los beneficia, e hizo entrega de 12 mil firmas de pescadores de la región que se oponen a la obra.
Fernando Treviño Montemayor, coordinador del Consejo Consultivo para el Desarrollo Sustentable Núcleo Nayarit, recomendó hacer estudios de mayor amplitud, que la MIA solvente las dudas planteadas por grupos ecologistas y se escuche la voz del pueblo.
Rechazo en Acaponeta
Pobladores de San Blasito, municipio de Acaponeta, dijeron que su pueblo será inundado y ellos cambiados de lugar, por lo que rechazan la obra.
Indígenas coras, huicholes, tepehuanos y mexicaneros dijeron que resultarán afectados sus 11 sitios sagrados, entre ellos Muxatena, que se encuentra entre San Pedro Ixcatán y Presidio de los Reyes.
El secretario de Gobierno, José Trinidad Espinosa Vargas, presente en la reunión, dijo que el gobierno, principal interesado en que la gente sepa cómo se desarrollará esta obra, sabe que la MIA debe cumplirse a cabalidad, de lo contrario el gobierno del estado no apoyará la construcción. Esto no es una cuestión política sino de que haya beneficios para todos
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Durante la junta hubo 66 ponentes, quienes expusieron sus pros y sus contras, se realizaron 86 preguntas por escrito a las cuales la paraestatal dio respuesta, aunque Ernesto Bolado, de Voces por la Naturaleza, reclamó que los representantes de la CFE evadieran los cuestionamientos.
Los ponentes que aprobaron la construcción dijeron que con la obra ya no habrá inundaciones y al menos durante cinco años en las localidades cercanas donde ahora no hay empleo tendrán una fuente de ingresos, sumado a que en la mano de obra que se contrate para los trabajos se dará prioridad a personal de la región.
La reunión concluyó con la cuarta parte de los asistentes, y quienes se quedaron, la mayoría, eran personas de otros municipios, por donde el paso del río supone beneficios.