Legisladores capitalinos, líderes partidistas y jefes delegacionales fustigaron ayer la intención de los diputados federales del PAN de querer dar un albazo legislativo con el dictamen que regularía las marchas en el Distrito Federal, y calificaron de adecuada la decisión de las bancadas en la Cámara de Diputados de que en lugar de llevarlo al pleno para su votación este jueves se pida a la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) una opinión técnica en torno a la propuesta del blanquiazul, para determinar si viola derechos humanos o constitucionales de los habitantes de la capital del país.

Enrique Vargas, secretario general del PRD-DF, dijo que es una torpeza lo que está haciendo el PAN en la Cámara de Diputados con su pretensión de limitar derechos ganados durante años de lucha; por eso no han logrado arraigarse en la ciudad. Por actitudes retrógradas como esas el PAN ya no gobierna y ha ido perdiendo los espacios que en algún momento ganó.

Jorge Gaviño, líder del Panal en esta capital, manifestó que mediante la presión política los legisladores federales de Acción Nacional quieren quitarle autonomía al DF, y”es claro que no es necesario reglamentar esos derechos constitucionales; creo que más bien lo que buscan es un albazo mediático.

En la Asamblea Legislativa, Ariadna Montiel, secretaria de la Comisión de Gobierno, remarcó que los panistas no sólo buscan regular las marchas, sino la libertad de expresión, lo cual es un riesgo para la consolidación del estado democrático de derecho, y, al igual que su compañera de fracción (PRD), Dinorah Pizano, consideró acertado pedir la opinión de la CNDH sobre el dictamen de la iniciativa panista.

A su vez, los jefes delegacionales de Cuauhtémoc, Alejandro Fernández, y de Azcapotzalco, Sergio Palacios, se manifestaron en contra de la regulación de las marchas en el DF. Coincidieron en que las grandes transformaciones sociales de la capital y del país no han sido por concesión, sino que obedecen, en buena medida, a las movilizaciones de la gente. La Cámara de Diputados podrá tener las facultades, pero no tiene la legitimidad para decidir lo que se haga o no en la ciudad, remarcó Fernández.