En su etapa final de existencia, el Instituto Federal Electoral (IFE) planea definir una ‘‘ruta crítica’’ que le permita ‘‘cerrar el mayor número de expedientes’’ a fin de permitir que el organismo que lo sustituirá surja con la más baja cifra de pendientes, sostuvo el consejero presidente del instituto, Lorenzo Córdova.

Entre ellos, destacó, se analiza la posibilidad de acelerar en lo posible la revisión del proceso de conformación de nuevos partidos políticos y en lo posible, si el tiempo da, concluirlo.

El consejero presidente argumentó: ‘‘Somos los que hemos seguido el proceso, creamos las reglas a que se han sujetado las organizaciones, generamos los protocolos de actuación y creo que sería bueno, aunque no depende sólo de nosotros, sino de los tiempos del Congreso, que sería conveniente que lo cerráramos’’.

–¿Es factible hacerlo en dos meses? –se le preguntó.

–Dependerá de las capacidades que tengamos. No es una decisión tomada y habrá que analizarlo, porque debe ser una decisión impecable porque estoy seguro que será (…) profundamente escrutada. Tanto si el IFE o el Instituto Nacional de Elecciones –dado el caso por los tiempos– decide conceder el registro como si no lo hace. Es una decisión donde no hay margen de error.

Esa ‘‘ruta crítica’’ que ha establecido el IFE no sólo abarca los encuentros ya sostenidos con los partidos políticos, la Cámara de Diputados y el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, sino también avanzar lo más posible programas y acciones relacionadas directamente con el proceso electoral que arranca en octubre.

‘‘Pensamos en el documento de la Estrategia nacional para la integración de mesas de casilla como borrador para dejarlo a la Comisión de Capacitación; los formatos de documentación electoral; los modelos de materiales electorales que dejaremos en la Comisión de Organización y otros temas relevantes como los lineamientos para el recuento de los paquetes electorales’’, aseguró por su parte el consejero Marco Antonio Baños, quien mañana tomará protesta como el nuevo consejero presidente del IFE.

En todos los casos, precisa, se trata de elaborar borradores que sirvan de ‘‘plataforma de arranque’’, como documentos de trabajo que retomará en su momento la nueva institución, consideró Baños. Se prepara ya también la entrega puntual de todos los bienes materiales, financieros y humanos.

Para Córdova, el cierre institucional y el nacimiento de la nueva institución deben realizarse de forma estable y sin sobresaltos. En este sentido, destacó la importancia del encuentro efectuado con los magistrados del tribunal electoral, la semana pasada, en el que expusieron las acciones que pretende realizar el IFE en esta última etapa.

Si bien no hubo acuerdos formales, asumió Córdova, se dejó clara la pertinencia de que, en la medida de lo posible, los expedientes que tiene el instituto pendientes con el tribunal electoral pudieran cerrarse aún en esta administración y con ello allanar el surgimiento del Instituto Nacional de Elecciones (INE).

Sin embargo, el expediente central que preocupaba al IFE ya ha sido resuelto por el TEPJF, que es el relacionado con el domicilio encriptado en las credenciales de elector. Aunque hay casos aún sin resolver que involucran al IFE y los seguirá habiendo en este periodo, en principio no serían prioridades en la agenda de la nueva institución para resolverlos en lo inmediato.

–¿Concluir el proceso de redistritación es factible?

–No lo hemos decidido. Es un proceso interrumpido hasta que no estuviera la reforma electoral, por si había cambios que la impactaran. En su caso, el trabajo está esencialmente concluido y faltaría su aprobación.