Jorge Vergara es un señor brillante, excesivamente brillante, rodeado de puro nefasto, expone rotundo el entrenador José Luis Sánchez Solá, quien así explica el fracaso de uno de los equipos más populares del futbol mexicano, Guadalajara, hoy bajo amenaza de descenso.

El Chelís sólo tiene agradecimiento y elogios para el empresario Vergara, a quien considera un señor muy necesario para este futbol, pero espero que algún día entienda que la gente que lo rodea no lo beneficia en nada.

Admite que en Chivas USA él no dio los resultados esperados, simplemente porque no encajó en un balompié que se desarrolla casi en la indiferencia.

El futbol en México se vive con más sentimiento, como que está más arraigado, la gente está muchísimo más metida. Acá es un espectáculo visceral, intenso, y allá (en la Major League Soccer, MLS) sólo queda en espectáculo de fin de semana.

Refiere: Empecé muy bien en un plan que Vergara preparó. Él me invitó a trabajar, pero las cosas se fueron desfigurando antes de que empezara el torneo. Me contrató en diciembre (de 2012) y la temporada empezaba en marzo. Sin embargo, en enero me cambió al director deportivo y yo no resulté de su agrado, indica en alusión a Dennis Te Kloese y a Juan Francisco Palencia.

“Fue cosa de toparme con piedra tras piedra, tras piedra... La cosa degeneró y me tuve que ir. Se arruinan los planes. Mi rendimiento en la cancha no fue bueno, mas eso no le importaba a Vergara; ¡el quinto objetivo era hacer puntos!

“Yo tenía 31 por ciento (11 unidades en 12 juegos) de productividad, luego metieron a José Luis Real ¡y él hizo 21 por ciento! (15 puntos en 22 partidos), señal inequívoca de que no fue por los resultados –que dejara el equipo–, pero encontraron la excusa”.

Ese fracaso parece no haber tenido consecuencia alguna para el ex cruzazulino Palencia ni para el Güero Real, dupla que ahora está al frente del Rebaño Sagrado.

Pese a encontrarse desempleado, el entrenador Sánchez Solá afirma que está dispuesto a ir casi a cualquier equipo, menos a Chivas: No, no, no.

Y agregó: “Las ideas de Vergara rayan en esa brillantez que menciono, pero cuando se va desglosando en todo su organigrama va perdiendo valor por la infinidad de pujas que hay ahí entre unos y otros. Entonces esa idea inicial llega a la cancha totalmente desdibujada.

–¿Se trata de un personaje influenciable?

–No, simplemente no se entera de todos esos movimientos que hay abajo de él. Tendría que entender eso, pero tampoco soy nadie para darle consejos. En este momento sólo trato de dirigir mi vida y no sudar fiebres ajenas. Estoy en espera de una oportunidad que en verdad la sienta.

Chelís, por ahora comentarista, dos veces técnico del Puebla, ex de Estudiantes Tecos y de Correcaminos, considera que las decisiones de los dueños, como violar sus propios reglamentos, en el caso de la multipropiedad, llevan al futbol mexicano a perder credibilidad.

“Se ve mal lo que hacen, pero como son los propietarios y no existe una institución ni nadie que los regule, lo que hacen está bien. De la misma manera en que ponen hoy, mañana quitan. El que votó por blanco, mañana decide que sea negro. Todo dependerá de cómo le vayan cayendo las cosas y con puros remiendos se las arreglan para que su sociedad siga caminando.

“Claro, pierde coherencia. México es un país lleno de talento y jóvenes, la materia prima se tiene, no obstante, todas estas decisiones llevan al futbol a un punto de descrédito... Y ocurre que en medio de todo, o mejor dicho, a pesar de todo eso, este hermoso deporte está candente, vivo, rutilante.

“Me gustó mucho ver al León y al América porque fueron equipos que intentaron cosas diferentes y por eso tuvieron resultados diversos. Si más clubes lo hicieran, la gente estaría más metida en la liga y nuestro futbol tendría más identidad. No sería tan chambista, ese es el gran problema”.