Miércoles 5 de junio de 2013, p. 24
Nueva York. El grupo informático Apple negó ayer ante la justicia de Estados Unidos haber orquestado un acuerdo con las principales casas editoriales para subir los precios de los libros electrónicos, de lo cual es acusado por el gobierno. Apple lanzó su tableta iPad en la primavera de 2010 y ese día el precio de la mayoría de los libros electrónicos se incrementó más de 15 por ciento
, resumió Lawrence Buterman, fiscal del Departamento de Justicia, en el primer día del juicio contra Apple en Nueva York. El fiscal describió un sistema coordinado organizado por Apple
, que a sabiendas e intencionalmente ayudó
a los editores a subir los precios. El juicio se celebra más de un año después de que el Departamento de Justicia demandó a Apple y a cinco de las editoriales más grandes de Estados Unidos acusándolas de trabajar juntas de forma ilegal para aumentar los precios de los e-books y anular el control de mercado de Amazon. Apple acude sola al juicio después de que las cinco editoriales acordaran eliminar las prohibiciones sobre los descuentos mayoristas y pagar colectivamente 164 millones de dólares para beneficiar a los consumidores. Las cinco editoriales involucradas son la francesa Hachette, las estadunidenses HarperCollins (News Corp) y Simon & Schuster (CBS), la británica Penguin (Pearson) y una filial de la alemana Bertelsmann, Macmillan, que prefirieron llegar a un acuerdo con las autoridades y sólo participarán como testigos.