Riesgo de que el PIB se ubique por debajo de 0.9% en el periodo
Sábado 11 de mayo de 2013, p. 24
La desaceleración de la economía mexicana, que comenzó en la segunda mitad de 2012 y se hizo más pronunciada a partir del inicio de 2013, ocasionó que en marzo pasado la producción industrial se desplomara 4.9 por ciento en términos reales, en comparación con el mismo mes del año previo. Así, en el primer trimestre de 2013, la producción industrial registró una caída de 1.5 por ciento en términos anualizados, respecto del mismo periodo del ejercicio precedente, la mayor baja desde octubre-diciembre de 2009, reportó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía ( Inegi).
Los analistas de Citi-Banamex advirtieron que con ello aumentó el riesgo de que el crecimiento del producto interno bruto (PIB) en el primer trimestre pudiera estar ligeramente por debajo de 0.9 por ciento anual, resultado que se publicará el próximo viernes.
Solamente en marzo de 2013 disminuyó 4.9 por ciento en términos reales en relación con el mismo mes del año pasado.
Este sorpresivo desplome fue superior a 2 por ciento estimado por los especialistas del Grupo Financiero Santander.
El Inegi explicó que este desempeño se vio influido a la baja por el periodo de la Semana Santa, que fue en marzo.
Por sector económico, las industrias manufactureras cayeron 5.8 por ciento como resultado del descenso de la producción de la mayoría de los subsectores, destacando el de equipo de transportes. Les siguieron el de la industria química; industria de las bebidas y del tabaco; industrias metálicas básicas; industria alimentaria; productos a base de minerales no metálicos; equipo de generación eléctrica y aparatos y accesorios eléctricos; industria del plástico y del hule,y de prendas de vestir, entre otros.
La construcción se contrajo 5.2 por ciento, derivado de menores obras de edificacióny de ingeniería civil u obra pesada, y trabajos especializados para la construcción.
Electricidad, agua y suministro de gas bajó 3.9 y minería, 1.5, a consecuencia de la caída de 3.7 por ciento en la producción no petrolera y de 0.9 por ciento en la petrolera, durante el mismo lapso.