La Confederación Nacional Campesina (CNC) anunció que asumirá la defensa jurídica de los miles de migrantes mexicanos defraudados por la empresa Chamba México con la promesa de empleo en Estados Unidos y Canadá. Sin embargo, hasta ahora las autoridades correspondientes no han detenido a los defraudadores.

El senador y presidente de la CNC, Gerardo Sánchez, informó que en reunión con los coordinadores del proyecto Jornaleros Safe, Mariano Yarza y Mayela Blanca, le informaron que la empresa fue autorizada por la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) para operar como agencia de colocación. Los representantes de Jornaleros Safe acudieron a la CNC para solicitar su apoyo en defensa de los migrantes extorsionados y para demandar a los gobiernos de Estados Unidos y México que aceleren los términos de un gran acuerdo en la materia con base en la nueva ley de migración, dijo.

Fue en diciembre de 2012 que Chamba México reclutó a miles de jornaleros de 19 entidades, a quienes les cobró 7 mil pesos por persona para el supuesto pago del transporte y el trámite de las visas H2A y H2B. La empresa tenía oficinas en Monterrey, San Luis Potosí, Puebla y Toluca, y supuestamente facilitaba los contactos y la contratación inmediata en Estados Unidos y Canadá, con salarios de hasta 15 dólares por hora.

Sánchez García instruyó a los legisladores cenecistas, coordinados por el diputado Rubén Escajeda, a que elaboren un punto de acuerdo para que se exija a las autoridades correspondientes una investigación exhaustiva a nivel federal; crear mecanismos de denuncia inmediata contra agencias de ese tipo, donde participen la Procuraduría General de la República y la STPS, y que se modifique el reglamento de agencias de contratación, entre otros aspectos.

Para la reparación del daño,  la CNC y Jornaleros Safe exigen al Servicio Nacional de Empleo que apoye a los defraudados con capacitación, los coloquen en un trabajo en el país, y que la Secretaría de Relaciones Exteriores reponga los pasaportes que hurtó la empresa fantasma a un costo mínimo o, si es posible, gratis.