Tienen enorme rentabilidad, por eso deben retribuir a la ciudad: senador argentino
Sábado 6 de abril de 2013, p. 34
Ante la altísima rentabilidad
que logran con los beneficios generales de la ciudad, las grandes urbes como la capital de México deben analizar la pertinencia de cobrar un impuesto especial a las desarrolladoras inmobiliarias por construir a una mayor altura y en una superficie superior a los 5 mil metros cuadrados, sugirió el senador de Argentina, Miguel Lifschitz.
Intendente de Rosario –la segunda ciudad más importante de su país, después de Buenos Aires– durante el periodo 2003-2011, tiempo en el cual estableció un programa de desarrollo local, Lifschitz opinó que la densificación de las ciudades mediante la verticalidad es buena, porque abarata los servicios, pero advirtió que ésta debe tener límites y no ser el patrón generalizado, porque trae consigo también muchos perjuicios.
De visita en la capital del país, invitado por la Secretaría de Desarrollo Económico (Sedeco), para participar en un seminario sobre desarrollo económico, el integrante del Partido Socialista indicó que si bien cada ciudad tiene sus propias características, se pueden replicar experiencias como las vividas en Rosario, donde se estableció una normatividad específica para todos los grandes proyectos urbanos.
Se trata de una compensación por el uso urbanístico que le otorga la ciudad, al autorizarles construir a mayor altura o por algún cambio de uso de suelo, que les permite una rentabilidad extraordinaria y es correcto que de esa rentabilidad haya retribución al municipio
, apuntó.
“Esas aportaciones –abundó– pueden ser económicas, en tierras destinadas a espacios u obras públicas, que debe hacer la iniciativa privada, pero que son transferidas a la ciudad.
Advirtió que para establecer esta estrategia hay que ser muy cuidadosos cuando se definen los lugares donde se permite la construcción en altura y muy respetuosos también de los entornos urbanos, donde predomina la baja altura es recomendable mantenerlo así
.
En entrevista, el legislador señaló que la inversión inmobiliaria es un factor importante en la actividad económica de cualquier urbe, pero no sólo debe ser vista desde ese punto de vista, sino también tomar en cuenta que influye en el modelo de ciudad que se está construyendo o se quiere construir.
Miguel Lifschitz consideró que como parte de un proyecto de desarrollo, desde lo local, también se debe voltear a ver otras alternativas de apoyo a la pequeña y mediana empresa, al comercio local, y la promoción de la economía social.