Integrantes de la CRAC se reúnen con el alcalde de Tixtla
Jueves 14 de marzo de 2013, p. 41
Tixtla, Gro.,13 de marzo.
Elementos del 41 batallón de infantería del Ejército Mexicano intentaron en dos ocasiones desarmar a los policías comunitarios de Acatempa, municipio de Tixtla, miembros de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias-Policía Comunitaria (CRAC) cuando realizaban una marcha-caravana en demanda de audiencia con el edil perredista Gustavo Alcaraz, a quien acusan de represor.
A las 8 horas alrededor de 200 habitantes de Acatempa partieron rumbo a Tixtla, pero en el trayecto un contingente de alrededor de 70 soldados, encabezados por el teniente coronel N.
Hernández, amagaron con desarmarlos, pero el comisario de la comunidad, Pastor Coctecon Platado, con su escopeta terciada al pecho, pidió al mando castrense respeto.
En el jaloneo entre militares y comunitarios, un grupo de mujeres indígenas se acercó y una le dijo al teniente coronel que no los reprimieran, que mejor fueran a detener a los sicarios
. El jefe militar ordenó que dejaran pasar al contingente.
Molesto, advirtió al comisario Pastor Coctecon que no podían ingresar armados a Tixtla. En ese momento estudiantes de la Normal Rural de Ayotzinapa, participantes en la marcha-caravana, comenzaron a gritar ¡Cuidado, cuidado, cuidado con Guerrero, estado, estado, estado guerrillero!
, en respaldo a los campesinos, quienes continuaron su camino.
Querían desarmar a los comunitarios, pero les dijimos que la Constitución nos ampara, y la ley estatal 701 (que reconoce el funcionamiento de las policías comunitarias). Le dijimos (al teniente coronel) que es hostigamiento, pero no les hacen nada a los sicarios. Les dijimos que hicieran recorridos en Tixtla, que no somos sus enemigos; sólo le estamos dando seguridad a nuestros pueblos
, expresó Gonzalo González Guerrero, promotor de la policía comunitaria en Tixtla y Ayutla de los Libres.
Cuando los manifestantes marchaban por la carretera Chilapa-Chilpancingo, antes de ingresar a Tixlta, los soldados, a bordo de patrullas y camionetas, intentaron nuevamente desarmar a 50 policías comunitarios, incluidos elementos provenientes de la casa de justicia de Ayutla de los Libres.
El teniente coronel Hernández, acompañado de decenas de militares, advirtió que no podían ingresar armados a la ciudad, pero los policías comunitarios convencieron a los soldados de que les permitieran continuar su camino.
Finalmente, los contingentes arribaron al ayuntamiento de Tixtla, donde se reunieron con el alcalde Gustavo Alcaraz, quien se comprometió a atender sus demandas. Al terminar la reunión, los ciudadanos de Acatempa, acompañados por los policías comunitarios, regresaron a su comunidad, escoltados por soldados y elementos de diversas corporaciones policiacas, además de un helicóptero militar.