La economía sigue a la baja
Resultados inquietantes
Río humano acompaña a HC
on la atención concentrada en el arranque del gobierno entrante, la pactomanía
desatada, las grillas prelectorales y los acontecimientos de gran calado, como el encarcelamiento de Elba Esther Gordillo (y los que se acumulen en semanas venideras), la actividad económica ha pasado a un segundo plano, no obstante que genera noticias no del todo alentadoras. De hecho, en San Lázaro advierten que la tendencia descendente de dicha actividad –más que obvia desde cuando menos el inicio de la segunda mitad del año pasado– resulta inquietante
, por mucho que el ruido político ocupe los principales espacios informativos.
Los especialistas de la Cámara de Diputados lo resumen así: los indicadores dados a conocer en la semana por diversos organismos fueron desfavorables. El producto interno bruto reportó una variación anual de 3.18 por ciento durante el cuarto trimestre de 2012, el menor incremento en los últimos seis trimestres. Incluso, 2012 cerró con un crecimiento económico (3.92) por debajo de lo esperado por el Banco de México y por la Secretaría de Hacienda (4). En particular, para diciembre se reportaron datos negativos, pues el Indicador Global de la Actividad Económica disminuyó 0.99 por ciento respecto al mes anterior y las ventas al menudeo y mayoreo cayeron significantemente (1.81 y 8.77 por ciento anual, respectivamente)
.
Además, los datos económicos de inicio de año tampoco son halagüeños
. En materia laboral, en enero, el empleo formal se expandió en sólo 35 mil puestos de trabajo y la Tasa de Desocupación Urbana creció 0.66 puntos porcentuales anuales, para ubicarse en 6.4 por ciento. Asimismo, la inflación de la primera quincena de febrero aumentó 0.24 por ciento, considerablemente por arriba de lo observado el mismo mes del año anterior (0.07 por ciento). Si además se considera que en Guanajuato se detectó un nuevo brote de gripe aviar, es de esperar que la inflación repunte en febrero.
El Centro de Estudios de las Finanzas Públicas (CEFP) de la Cámara de Diputados reseña que el Inegi reveló que en el cuarto trimestre de 2012 el producto interno bruto registró un incremento anual de 3.18 por ciento, proporción por debajo de la observada en el mismo trimestre de 2011 (3.94 por ciento) y la más reducida de los últimos seis trimestres. Se aprecia que el crecimiento del PIB no fue del todo satisfactorio dado que fue menor a lo previsto en la Encuesta de las Expectativas de los Especialistas en Economía del Sector Privado de enero de 2013 (3.3 por ciento), a lo anticipado por el Banco de México (3.3) y a lo pronosticado por la Secretaría de Hacienda (3.6).
El impulso económico fue resultado de la dinámica diferenciada de sus actividades. Las actividades primarias pasaron de un alza de 0.34 por ciento en el cuarto trimestre de 2011 a un incremento de 7.24 por ciento en el mismo trimestre de 2012. Por su parte, en el periodo señalado, las secundarias y terciarias perdieron dinamismo al pasar de 3.80 y 5.07 por ciento a 1.75 y 3.37 por ciento, en ese orden. A lo largo de 2012, el PIB tuvo un incremento anual de 3.92 por ciento, por debajo de lo anticipado por la SHCP y el Banco de México (4 por ciento) y de lo estimado por el sector privado (3.96). Si bien es marginalmente mayor a lo observado en 2011 (3.89), es inferior a la expansión que se tuvo en 2010 (5.28).
Así, apunta, la tendencia descendente de la actividad económica nacional anual en la segunda mitad de 2012 es inquietante, toda vez que el entorno externo es adverso. La economía global muestra signos de debilidad y se ha dado un ajuste a la baja en sus expectativas de crecimiento económico para 2013 (tanto para economías avanzadas como emergentes, como la mexicana), lo cual significaría un alza de los riesgos a la baja sobre la actividad productiva nacional ante, posiblemente, una menor dinámica de las exportaciones mexicanas
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Por lo que toca al mercado laboral, el citado centro de estudios señala que (independientemente de su reducida calidad) la cantidad de empleos generados en los últimos doce meses también presenta una ligera desaceleración. Mientras que a diciembre de 2012 habían 699 mil 406 nuevos trabajadores registrados en el IMSS (tasa de crecimiento de 4.6 por ciento), en enero de 2013 pasó a 684 mil 265 (4.5 por ciento), el menor dinamismo anual desde mayo de 2012 y la tercera disminución consecutiva en el ritmo de crecimiento, lo que se vio reflejado en la economía en su conjunto (no sólo en el sector formal).
En el primer mes del presente año, la tasa de desocupación (TD) en el país se ubicó en 5.4 por ciento, lo que equivale a un incremento anual de 0.52 puntos porcentuales. Si el desempleo se analiza sólo en zonas urbanas (como se calcula en Estados Unidos), tal indicador fue de 6.4 por ciento, para un crecimiento de 0.66 puntos. Si bien parte del aumento en la tasa de desocupación se explica por la reducción en la población económicamente activa, pues el indicador se calcula como proporción de ésta, la mayor parte del deterioro se debe a un aumento real en el nivel de desempleo; de acuerdo con estimaciones del CEFP, tan sólo en enero el desempleo creció en 239 mil
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En suma, anota el CEFP, tanto el reporte del IMSS como el de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo caracterizan un mercado laboral que va perdiendo dinamismo, pues prácticamente todos los indicadores laborales tuvieron retrocesos. Es importante tener en cuenta que la salida de personas del mercado laboral (la proporción de la PEA se ubicó en el nivel más bajo en los últimos dos años), podría significar un cambio sustancial en el mercado laboral, pues el que este indicador se encuentre en niveles tan bajos podría implicar que las oportunidades laborales escasean por la baja actividad económica, motivando a que la gente deje de buscar trabajo
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Las rebanadas del pastel
Impresionante el interminable río humano que acompañó al féretro de Hugo Chávez a la Academia Militar de Caracas. Y de la unidad de ese pueblo venezolano depende que la profecía no se cumpla: cuando yo me muera volverán los políticos a repartirse esta vaina como en los tiempos de los godos, ya lo verán, decía, se volverán a repartir todo entre los curas, los gringos y los ricos, y nada para los pobres, por supuesto, porque ésos estarán siempre tan jodidos que el día en que la mierda tenga algún valor los pobres nacerán sin culo, ya lo verán, decía, citando a alguien de sus tiempos de gloria
(Gabriel García Márquez, El otoño del patriarca).