Copenhague, 31 de enero. El ciclista danés Michael Rasmussen, quien vistió el suéter amarillo en el Tour de Francia en 2007, admitió que se dopó de manera casi ininterrumpida durante 12 años y anunció el fin de su carrera deportiva.

Utilicé productos y métodos dopantes desde 1998 a 2010, dijo Rasmussen, de 38 años, quien abandonó la competencia francesa cuando portaba el suéter de líder, según una conferencia de prensa transmitida por la televisión pública DR.

Rasmussen enumeró las sustancias prohibidas a las que recurrió: EPO, hormonas de crecimiento, testosterona, insulina y cortisona, sin saltarse las transfusiones sanguíneas.

Su finalidad, ahora, es ayudar a limpiar el ciclismo, dijo el pedalista, antes de anunciar su retiro definitivo de las pistas, aunque se negó a revelar los nombres de sus cómplices.

La Confederación Danesa de Deportes anunció el inicio de una investigación y Rasmussen dijo que aceptará la suspensión que seguro le impondrán.

Es una ruptura definitiva con el pasado, indicó Claus Hembo, director deportivo de su último equipo, Christina Watches-Onfone. Queremos tomar la iniciativa y alentar a los corredores que se hayan dopado a manifestarse, añadió.

Su confesión se produce dos semanas después de que Lance Armstrong, vencedor del Tour en siete ocasiones, admitió por primera vez el consumo de sustancias prohibidas para mejorar su rendimiento, como lo había acusado la Agencia Estadunidense Antidopaje, que le retiró todas sus victorias desde 1998.

Rasmussen, acompañado por la dueña de su equipo, Christina Hembo, y del mánager, Claus Hembo, aseguró que siente alivio por no seguir mintiendo, algo que hice por demasiados años.

De acuerdo con lo que informó el entrenador, el pedalista colabora proporcionando información a varias agencias antidopaje.